Los colores del conocimiento
eBook - ePub

Los colores del conocimiento

Una visión policromática de la sabiduría humana

  1. 236 páginas
  2. Spanish
  3. ePUB (apto para móviles)
  4. Disponible en iOS y Android
eBook - ePub

Los colores del conocimiento

Una visión policromática de la sabiduría humana

Detalles del libro
Vista previa del libro
Índice
Citas

Información del libro

El colectivo de blogueros de Tendencias 21 ha confeccionado este libro con la finalidad de compartir los conocimientos adquiridos en sus respectivas disciplinas. Su finalidad es prestar un servicio de valor añadido a la sociedad, ayudándole a comprender la riqueza y complejidad del conocimiento humano en aquellas áreas en que cada bloguero es competente.No pretendemos ser exhaustivos, sino que en este esfuerzo nos anima un sabio pensamiento de Einstein: lo más incomprensible del universo es que sea comprensible. Aquello que hemos comprendido, lo compartimos con los demás.

Preguntas frecuentes

Simplemente, dirígete a la sección ajustes de la cuenta y haz clic en «Cancelar suscripción». Así de sencillo. Después de cancelar tu suscripción, esta permanecerá activa el tiempo restante que hayas pagado. Obtén más información aquí.
Por el momento, todos nuestros libros ePub adaptables a dispositivos móviles se pueden descargar a través de la aplicación. La mayor parte de nuestros PDF también se puede descargar y ya estamos trabajando para que el resto también sea descargable. Obtén más información aquí.
Ambos planes te permiten acceder por completo a la biblioteca y a todas las funciones de Perlego. Las únicas diferencias son el precio y el período de suscripción: con el plan anual ahorrarás en torno a un 30 % en comparación con 12 meses de un plan mensual.
Somos un servicio de suscripción de libros de texto en línea que te permite acceder a toda una biblioteca en línea por menos de lo que cuesta un libro al mes. Con más de un millón de libros sobre más de 1000 categorías, ¡tenemos todo lo que necesitas! Obtén más información aquí.
Busca el símbolo de lectura en voz alta en tu próximo libro para ver si puedes escucharlo. La herramienta de lectura en voz alta lee el texto en voz alta por ti, resaltando el texto a medida que se lee. Puedes pausarla, acelerarla y ralentizarla. Obtén más información aquí.
Sí, puedes acceder a Los colores del conocimiento de Blogueros de Tendencias21 en formato PDF o ePUB, así como a otros libros populares de Philosophy y Philosophy & Ethics in Science. Tenemos más de un millón de libros disponibles en nuestro catálogo para que explores.

Información

Editorial
Lola Books
Año
2015
ISBN
9783944203195
Edición
1
Categoría
Philosophy
EDUARDO MARTÍNEZ DE LA FE

1. El simio coronado: Historia de todos nosotros

Eduardo Martínez de la Fe es periodista científico y filósofo de la ciencia. Fundador y creador, junto a Alicia Montesdeoca, del proyecto Tendencias, ha dedicado los últimos 25 años a la difusión del conocimiento científico desde una perspectiva compleja e interdisciplinar.
El hombre tiene dos ojos
Uno ve sólo lo que se mueve en el tiempo fugaz
El otro lo eterno y lo divino
EL LIBRO DE ANGELUS SILESIUSI1

Una especie con principio y fin

En un principio era el pie, señala el antropólogo Marvin Harris2 para explicar el origen histórico de nuestra especie y la importancia que tuvo para nuestros antepasados los homínidos, hace cinco millones de años, el hecho de caminar erguidos antes incluso de adquirir el uso de la palabra o de la razón. El empleo de herramientas que impulsó la evolución posterior de estos homínidos va asociado al hecho de caminar erguidos.
La antropología moderna considera que gorilas, chimpancés y los seres humanos primitivos tuvieron a los simios como antepasado común hace no más de seis millones de años. La vida de los simios se remonta a unos 30 millones de años. Al final de esta rama de la vida se encuentra el retoño de nuestra familia zoológica, el homínido, del que surge el homo sapiens.
Si aumentamos el zoom, descubrimos que el universo se formó hace una quincena de miles de millones de años y que nuestro hábitat natural que es el planeta Tierra tiene aproximadamente la mitad de la edad del universo. Escalas de tiempo que, a pesar del desarrollo de nuestra especie, seguimos sin poder asumir: sólo hace un millón de años que nos pusimos de pie sobre la Tierra y hemos perdido el rastro de nuestro pasado más remoto.
Desde la Edad de Piedra hemos invertido poco más de 100.000 años en pasar de la caza y la recolección a la sociedad de nuestros días, lo que representa el ocho por ciento del tiempo total de nuestros antepasados los erectus. Si nuestra especie resiste tanto como el erectus, tenemos otros 1,2 millones de años por delante, señala Harris3. Desde la antropología es todo lo que podemos saber sobre nuestro futuro más lejano.
La zoología es más explícita: el 99,999 % de las especies conocidas ha desaparecido y esta desaparición es, seguramente, el destino reservado a todas las especies, señala el zoólogo de Harvard Richard Lewontin.4 Antes o después de 1,2 millones de años nuestra especie será historia, un episodio más de la evolución cósmica, nos indica la experiencia de otros seres vivos.
El ya desaparecido Aurelio Peccei, fundador del Club de Roma, estableció en 1981 una escala de la evolución que nos ayuda a situarnos en las dimensiones temporales en las que nuestra especie ha desarrollado su experiencia.5 Si medimos la historia del universo en los seis días de la creación relatados por el Génesis, del lunes al sábado, la Tierra habría surgido en los primeros minutos de la madrugada del lunes y los gérmenes de vida el jueves por la mañana. Estos gérmenes no alumbraron a los especímenes más evolucionados, los mamíferos, hasta la tarde del sábado. Cuando faltaba un cuarto de hora para la medianoche de ese sábado irrumpieron los antropoides y homínidos, nuestros más remotos antepasados biológicos. La aventura humana comienza la medianoche del sábado y desde entonces sólo ha transcurrido menos de un minuto (un millón de años).
No sólo la génesis de nuestra especie ha sido apoteósica, sino que en la escala de la evolución aún somos recién nacidos. Un millón de años, que es lo que nuestra especie lleva sobre la Tierra, equivale a diez mil siglos, pero el 99% de este período, que corresponde a la prehistoria, no tiene pasado conocido, sino vestigios. De la experiencia humana sólo conocemos los cien últimos siglos, es decir, diez mil años, el uno por ciento de nuestra historia, medio segundo de la escala temporal del Génesis. ¿Cómo amar a nuestra especie si apenas la conocemos? Estamos en el ecuador de nuestra experiencia evolutiva y somos la mayor incógnita del universo.
Este desconocimiento de nuestro más remoto pasado nos lleva a olvidar que somos descendientes directos del homo sapiens primitivo, con el que no tenemos vínculos afectivos. Nuestra memoria personal se remonta sólo a unos siglos atrás, pero hubo un tiempo en el que vivíamos en cavernas. La inteligencia de la que hoy disfrutamos es el resultado de miles de años de evolución. Cien mil millones de seres humanos antes que nosotros, tantos como las estrellas conocidas de nuestra galaxia, han compartido esta cadena evolutiva para posibilitar que aquella dura experiencia primigenia de convivencia e inteligencia, de interpelación a mundos oníricos, madurase.
Nuestras manos son como las suyas, compartimos con el sapiens primitivo el mismo hábitat y en nuestros genes está escrita la historia de esta epopeya humana. Pero somos irreverentes con ese pasado, como si no fuera nuestro. La presión del presente y del futuro es más intensa en nuestras conciencias que la presión del pasado. Este desequilibrio nos lleva a olvidar también que somos efímeros, un instante insignificante de la vida del universo.

El principio de la inteligencia y la cooperación

La línea evolutiva que conduce al hombre moderno se separa de los simios hace unos cinco millones de años. Los simios son cuadrúpedos, el hombre es bípedo. Los simios tienen mandíbulas grandes y cerebro pequeño, el hombre mandíbula pequeña y cerebro grande. La mayoría de los simios está adaptada a la vida en los árboles; el hombre vive sobre la superficie terrestre. Cuando algunos grupos de simios dejaron los árboles comenzó la primera fase de la historia humana: Un simio bípedo y bimano sólo tiene sentido desde el punto de vista de la evolución porque podía hacer en el suelo algo que ninguna otra criatura había hecho nunca tanto ni tan bien: utilizar las manos para fabricar y transportar herramientas y utilizar herramientas para satisfacer necesidades cotidianas.6
Al bajar de los árboles, nuestros antepasados más remotos debieron sustituir la protección natural que les proporcionaba la altura por sus miembros superiores. Ya no los necesitan para colgarse de las ramas y de sus brazos dependen cada vez más. Sólo sobreviven las bandas cuyos miembros desarrollan las capacidades que reclama su particular método de supervivencia: destreza manual, control corporal y sensibilidad táctil. Es así como se consigue la primera proeza evolutiva: detallar en la corteza cerebral la representación de la mano y, especialmente, del pulgar.7
Merced a esta creciente utilización de las manos, las mandíbulas dejan de ser útiles para la defensa y pierden los grandes caninos y los premolares. Al reducir su tamaño original, las mandíbulas dejan más espacio a la masa cerebral. Es así como surge nuestra especie, bípeda, erecta, de gran cerebro, mandíbula pequeña y pulgar oponible, los rasgos distintivos del homo sapiens.
Esta transición de los rasgos corporales del simio al humano se presenta de modo continuo, sin rupturas. Es tan fluida que resulta imposible, basándose en los rasgos de los esqueletos, decidir dónde ha de trazarse una frontera entre el estadio prehumano y el humano.8 En cualquier caso, puede ser explicada naturalmente: no parece haber nada demasiado sobrenatural en la evolución de nuestra especie.9
La cooperación para la supervivencia es otro de los rasgos distintivos del homo sapiens desde sus orígenes: los individuos mutantes que tienen una habilidad superior para comunicarse entre sí, transforman el lenguaje genético de los simios, basado en los signos, en un sistema más flexible de símbolos compartidos, que es el fundamento del lenguaje. El papel crucial del lenguaje en la evolución humana no fue la capacidad para el intercambio de ideas, sino el incremento de las posibilidades de cooperación, señala Fritjof Capra.10
Como consecuencia de estas transformaciones, la conducta social se libera del dominio genético y se adapta a las circunstancias, provocando nuevos cambios en la neocorteza cerebral relativos a la comunicación y la socialización. Esencialmente, el homo sapiens no ha cambiado nada desde entonces. Somos sus descendientes directos.
La primera revolución que vive nuestro antepasado sapiens es la del fuego, utilizado ya por el erectus al menos medio millón de años atrás. Las diferentes posibilidades de este descubrimiento, desde aprovechar su aparición natural hasta conseguirlo rozando piedras, lleva al sapiens a emplear el fuego como herramienta o arma y posibilita a nuestros ancestros un control sobre la naturaleza que no había alcanzado ninguna otra especie.
El despegue es inmediato: el control de los miembros superiores, la sociabilidad y la superioridad obtenida sobre las demás especies por las herramientas, las armas y el fuego, desencadena la construcción de viviendas y el almacenamiento de comida. Una vez asegurada la supervivencia, es posible colonizar territorios fértiles. Se inicia la revolución neolítica: aparecen los cultivos y se domestican animales. Las bandas nómadas de homínidos devienen agricultores sedentarios.
La agricultura representa la mayor metamorfosis de nuestra especie, ya que le permite no vivir exclusivamente para la supervivencia. Hay tiempo para algo más que comer y defenderse, ya que las necesidades básicas están controladas mediante las cosechas, la caza y la arquitectura. Comienzan los tiempos históricos porque, por primera vez, nuestros antepasados dejan indicios de su pensamiento, de sus modos de expresión, de sus vidas. Estamos sólo a cien siglos del tercer milenio.

En la cúspide de la complejidad

En los últimos cien siglos se conforma lo que denominamos cultura humana: el homo sapiens toma conciencia de sí mismo y se descubre como el ser más perfecto y mejor dotado de la evolución biológica. Después de domesticar plantas y animales, nuestro espécimen controla otros procesos más amplios y fundamentales de la naturaleza o los interfiere con sus descubrimientos y proezas. Gracias a su inteligencia, se ha convertido en un agente decisivo de la evolución en toda la biosfera y, por ello, también en una amenaza para la supervivencia de la especie y de su hábitat.
Al término de estos cien siglos, que es cuando se ha cimentado la antropología, el homo sapiens comprende el proceso evolutivo que le ha permitido disfrutar del nivel más alto de inteligencia en la escala biológica. Al mismo tiempo, descubre la razón por ...

Índice

  1. Cubierta
  2. Titulo
  3. Derechos de autor
  4. Contenido
  5. Los colores del conocimiento
  6. 1. El simio coronado: Historia de todos nosotros
  7. 2. El conocimiento de las posibilidades humanas
  8. 3. La física en el siglo XXI. Problemas fundamentales y perspectivas
  9. 4. Neurociencia y sociedad
  10. 5. La Filosofía de la Ciencia hoy
  11. 6. Inteligencia Artificial
  12. 7. La comunicación en un mundo fluido: comunicación estratégica
  13. 8. ¿Es posible la sostenibilidad en el actual mundo globalizado?
  14. 9. Un método formativo para hoy
  15. 10. Negociación e interacción humana
  16. 11. Medicina Natural y Sociedad
  17. 12. Prospectiva: pensar sobre el futuro posible
  18. 13. El mundo en 3D
  19. 14. El cristianismo, ¿un acontecimiento histórico en trance de autosuperación?
  20. 15. La ciudad que viene
  21. 16. Telecomunicaciones y futuro tecnológico
  22. 17. La Sociedad Cyborg 133
  23. 18. ¿Pero, de qué estrategia estamos hablando?
  24. 19. Innovación y Creatividad
  25. 20. Lenguaje: mundos, realidades y emociones
  26. 21. Pensamiento Creativo e Innovación: Actitud y proceso para el negocio
  27. 22. Poesía y fractal, un acercamiento a la geometría del lenguaje 183
  28. 23. Arte y Tecnología 189
  29. 24. El Marketing en la Sociedad del Conocimiento
  30. 25. Las marcas en la era digital 207
  31. 26. El deporte visto con los ojos de la ciencia
  32. 27. La indisciplinada disciplina del no-saber
  33. 28. Diez lecciones de sátiras y sátiros
  34. 29. El papel de la Sociedad Civil en el Siglo XXI