Narrativas de vida, dolor y utopías
eBook - ePub

Narrativas de vida, dolor y utopías

Jóvenes y conflicto armado en Colombia

  1. Spanish
  2. ePUB (apto para móviles)
  3. Disponible en iOS y Android
eBook - ePub

Narrativas de vida, dolor y utopías

Jóvenes y conflicto armado en Colombia

Detalles del libro
Vista previa del libro
Índice
Citas

Información del libro

La investigación presentada en este libro estudia las relaciones establecidas entre los jóvenes y el conflicto armado en Colombia. Para ello se construyen tres historias de vida, de estudiantes del proyecto Utopía de la Universidad de La Salle –narrativas enmarcadas en profundo trabajo de campo que lleva consigo variedad de significados, tanto para el investigador como para los sujetos de estudio -. Estas tres historias, precedidas por el contexto histórico de la región de donde provienen sus protagonistas, se complementan con el análisis del conflicto armado desde las ciencias sociales. De esta manera, el autor despliega el punto de vista de los sujetos de investigación y de sus intenciones particulares; con ello, el texto aporta a la investigación social, mediante la descripción de la población y el ingreso del investigador al terreno.

Preguntas frecuentes

Simplemente, dirígete a la sección ajustes de la cuenta y haz clic en «Cancelar suscripción». Así de sencillo. Después de cancelar tu suscripción, esta permanecerá activa el tiempo restante que hayas pagado. Obtén más información aquí.
Por el momento, todos nuestros libros ePub adaptables a dispositivos móviles se pueden descargar a través de la aplicación. La mayor parte de nuestros PDF también se puede descargar y ya estamos trabajando para que el resto también sea descargable. Obtén más información aquí.
Ambos planes te permiten acceder por completo a la biblioteca y a todas las funciones de Perlego. Las únicas diferencias son el precio y el período de suscripción: con el plan anual ahorrarás en torno a un 30 % en comparación con 12 meses de un plan mensual.
Somos un servicio de suscripción de libros de texto en línea que te permite acceder a toda una biblioteca en línea por menos de lo que cuesta un libro al mes. Con más de un millón de libros sobre más de 1000 categorías, ¡tenemos todo lo que necesitas! Obtén más información aquí.
Busca el símbolo de lectura en voz alta en tu próximo libro para ver si puedes escucharlo. La herramienta de lectura en voz alta lee el texto en voz alta por ti, resaltando el texto a medida que se lee. Puedes pausarla, acelerarla y ralentizarla. Obtén más información aquí.
Sí, puedes acceder a Narrativas de vida, dolor y utopías de Pablo Iván, Galvis Díaz en formato PDF o ePUB, así como a otros libros populares de Ciencias sociales y Sociología. Tenemos más de un millón de libros disponibles en nuestro catálogo para que explores.

Información

Año
2014
ISBN
9789588844299
Categoría
Sociología

Relatos de vida. Narrativas de ensueño, nostalgia y muerte

Este capítulo consta de tres relatos de vida: el de Andy, Cubi y Juandro. Ellos, provenientes del Cesar, Casanare y Caquetá, reflejaron en sus narrativas tres diferentes formas de visualizar el conflicto en Colombia. No fue sencilla la construcción de sus relatos de vida, pues el tiempo vivido con ellos dentro del campus de la universidad, y de manera primordial el paso por sus casas y familias, me llevaron a estrechas relaciones de amistad y de confidencialidad, que en ocasiones dificultaron el trabajo investigativo, pero que definitivamente fueron la estrategia eficaz para registrar, analizar e interpretar sus relatos de vida.
Para cada relato de vida se manejó la misma estructura: primero el título general del escrito, tomado de una de las frases dichas durante las entrevistas o de la visión general del sujeto en su relación con el conflicto armado. Luego se realizó una breve introducción con las particularidades de los jóvenes y cómo llegaron a ser los sujetos de investigación7; por último, se hizo un contexto regional de la zona de procedencia del estudiante y el relato de vida dividido en tres partes diferenciadas en orden cronológico.
Cada uno de los relatos maneja sus particularidades dadas por la relación que se dio durante el trabajo de campo con los estudiantes, y por la alternativa etnográfica que se le dio a la investigación al querer reconocer plenamente la perspectiva del actor. El relato de Andy maneja una cronología detallada y una mirada determinada por las realidades de conflicto que vivió, ya que él mismo se ve y se construye como víctima del conflicto armado. El relato de Cubi es un ir y venir por las experiencias que marcan su identidad como llanero, sus relaciones cotidianas con el conflicto y su interés por aportar lo más íntimo de sus vivencias al investigador. Y la narrativa de Juandro pasa de los claros a los oscuros en sus relaciones con un grupo armado en particular, y por el interés de hacer claridad de su inocencia frente a los grupos al margen de la ley operantes en su región.
Aclaro que fui yo, como investigador social, quien elaboró los relatos: pensé sus estructuras, registré la información por diferentes medios, como entrevistas semiestructuradas, conversaciones informales, observación participante, compartir cotidiano, conocimiento íntimo de los sujetos, viajes a sus regiones de origen, triangulación de información y toma de fotografías. Cada uno de estos escritos, posterior a su construcción, fueron revisados por sus protagonistas, quienes dieron sus vistos buenos o sus necesarios cambios u omisiones; de igual manera, aunque por seguridad de los jóvenes no utilicé la información completa de sus identidades, cada uno de ellos me autorizó para utilizar los nombres reales y los lugares de procedencia en los relatos de vida.

Andy: “me persigue una guerra que no es mía”

Con el relato de Andy me encontré sin haberlo buscado. Ese encuentro tuvo lugar la noche del 18 de octubre de 2010 en el comedor de la Universidad de La Salle, sede Yopal, cuando se me acercó este joven solitario, de mirada despistada y diálogos inconclusos, y entabló una conversación que parecía no llevar a ningún lado. De pronto, en las noticias informaron la muerte de tres niños en Pueblo Viejo (Arauca) por parte del Ejército de Colombia, y me dice Andy: “Yo soy de esa vereda, mi hermana me acaba de contar que se desaparecieron esos niños hace unos días y que ya los encontraron, que al parecer fue el Ejército el que los mató. Es que la zona siempre ha estado ‘caliente’”. De este diálogo espontáneo se inició una relación de complicidad frente a los hechos más significativos de su vida; a veces, con cierta incredulidad sobre la espontaneidad de sus relatos, pues pareciera que conforme pasaba el tiempo, Andy se preparaba con mayores argumentos de prensa, de indagaciones en Internet y con preguntas a sus familiares. Lo que me hacía pensar que definitivamente quiere ser protagonista de su misma historia. Con este preámbulo y con la certeza de su necesidad de ser escuchado y de narrar su historia, presento el relato titulado “Andy: ‘me persigue una guerra que no es mía’”.
Foto 1. Horizontes Fuente: archivo personal.
Foto 1. Horizontes
Fuente: archivo personal.

Contexto regional: “a Dios lo que es de Dios, y al Cesar…, lo que le dejen”

Las características geográficas, económicas, políticas y culturales que presenta el departamento del Cesar lo han llevado a ser vulnerable a la presencia y apropiación de su territorio por parte de distintos grupos al margen de la ley; por ello, sus pobladores han tenido que construir sus historias paralelas a las múltiples confrontaciones experimentadas a través del tiempo, principalmente en los últimos treinta años.
La ubicación geográfica del Cesar, delimitado por la Serranía Motilona, la Serranía de Perijá y la Sierra Nevada de Santa Marta, lo convierte en un departamento estratégico, pues es corredor que comunica el centro con el norte del país por carretera y tren. Adicionalmente, es zona fronteriza con Venezuela, y por el sur del departamento cruza el importante oleoducto Caño Limón, Coveñas. Igualmente, es un territorio que representa una riqueza para el sector agropecuario, principalmente por la presencia de los hatos ganaderos y de los proyectos agrícolas (algodoneros, caficultores y palmicultores). Se complementa la riqueza del Cesar con las grandes minas de carbón ubicadas principalmente al norte del departamento, en los municipios de la Jagua de Ibirico, El Paso y Becerril (Bejarano, 1997, p. 197).
Todas estas características han marcado un derrotero de violencia en el departamento desde la década de 1970, con el ingreso de las FARC y posteriormente con la llegada del ELN. Estas dos agrupaciones comenzaron a apoderarse del territorio, e iniciaron los años de la bonanza marimbera y cocainera, negocios ilegales que utilizaron las mismas trochas y estructuras del contrabando. En la región, esta actividad no se miraba como delito, al estar influenciada por la cultura de la economía de frontera (Fundación Nuevo Arco Iris, 2008, p. 34).
Al comienzo de la década de los ochenta, las FARC se habían establecido en la Sierra Nevada y el ELN, por su parte, se encontraba en la zona de Curumaní con el frente Camilo Torres. De esta manera, el Cesar se había convertido en una zona de descanso y de recuperación para los grupos insurgentes. En estos años la guerrilla continuó con las actividades de reforma social y se dedicó a fomentar invasiones de tierras, con el objetivo de forzar actividades públicas de reforma agraria (para ello utilizó grupos de personas que, en ocasiones, no eran campesinas e invadieron muchas fincas de la región, las que fueron abandonadas por sus propietarios y algunas posteriormente adquiridas por el Incora para su parcelación).
La intensificación de la presencia guerrillera solo se da a finales de los ochenta y principios de los noventa. La lógica de su accionar y el proyecto de consolidación de control de este territorio habrían de cambiar con el anuncio de la inminente y potencial explotación del carbón en el Cesar y la Guajira. Este hecho no solo llevó a una mayor irrupción de frentes guerrilleros en la Sierra Nevada, sino que escaló el uso de la violencia a niveles sin precedentes. Dado que en los primeros años la industria minera era incipiente, la alta presencia de la guerrilla la llevaría a orientar toda su actividad de coerción y extracción de recursos hacia el grupo de ganaderos y la población urbana (Cuadernos PNUD, 2004, p. 87).
Ya finalizando los años ochenta, en el centro y norte del Cesar el ELN compartía su dominio con las FARC. En el costado oriental, en la Serranía, se asentaban el frente José Manuel Martínez y actuaba en el conjunto de los municipios de Becerril, Codazzi, La Paz, San Diego y Manaure. Igualmente, el frente Seis de diciembre hacía incursiones en la Jagua y en Becerril (Bejarano, 1997, p. 192). Desde estos años, los diferentes frentes de las guerrillas han pretendido dominar los corredores de movilidad entre los municipios de la Serranía del Perijá, de la Sierra Nevada de Santa Marta y los que limitan con Venezuela, espacio que facilita el ingreso de insumos militares y corredores del narcotráfico (Fundación Nuevo Arco Iris, 2008, p. 3).
Una de las estrategias de la guerrilla fue buscar el apoyo de la población civil, y eliminar así cuatreros y delincuentes, para constituirse en autoridad en ausencia del Estado. Además, la gradual implantación de los frentes del ELN y de las FARC había traído como secuela, en una primera fase, el incremento de los asesinatos, secuestros, extorsiones y otros delitos, como abigeatos, robos y asaltos. En particular, el secuestro tuvo índices tan altos que entre los años 1987-1995 se calculó una tasa promedio de casi 20 secuestros por 100.000 habitantes, superior en más de seis veces la tasa promedio nacional, que fue de tres secuestros en el mismo periodo. Estos fueron los tiempos en los que de la agenda de “Simón Trinidad”, y de su conocimiento del medio regional, salía el listado de los secuestrables de la región (Rangel, 2005, p. 14).
Es así como los grupos guerrilleros “boletean”, extorsionan, secuestran e interfieren las actividades económicas del departamento, especialmente las referentes al sector agropecuario y a los procesos de explotación y de transporte del carbón. Asimismo, aseguraron el control del poder local penetrando los sindicatos y acudiendo al asesinato de los dirigentes políticos departamentales, locales, alcaldes y concejales (Bejarano, 1997, p. 199).
Los paramilitares surgen en la segunda mitad de los años ochenta, cuando la guerrilla ejercía presión. Su despliegue estratégico se realizó en un principio como respuesta a la intensificación de la violencia guerrillera. Muy pronto se evidenció que también buscaban usar su aparato coercitivo para su propio enriquecimiento, así como regular y dominar la vida política de la región. A diferencia de la guerrilla, los paramilitares entraron a formar parte de la organización de esa sociedad en lo político, lo económico y lo militar. De esta manera, la región entró a formar parte del proyecto de expansión del paramilitarismo liderado por Mancuso y Castaño, líderes del bloque norte de las AUC. Como señores de la guerra llegaron a imponer reglas de seguridad, a apropiarse de la riqueza y a dominar la vida política local (Reno, 2000). Fueron estructurando redes de contacto con las personas víctimas de la guerrilla, con quienes les habían secuestrado o matado un hermano, o simplemente con quienes buscaban protección de la violencia guerrillera (Cuadernos PNUD, 2004, p. 90).
Los años noventa en el Cesar presentaron un contexto complejo de violencia: actuaron variados grupos al margen de la ley y hubo confrontación de la guerrilla con la fuerza pública; se dieron las acciones de la guerrilla contra los grupos económicos y otros grupos sociales. Por su parte, la acción de los paramilitares recayó sobre las redes de apoyo a la guerrilla (asesinatos, homicidios y desapariciones) y la delincuencia común aprovechó y extorsionó, secuestró, practicó el abigeato y con esto afectó las actividades económicas del departamento (Bejarano, 1997, p. 241). En cuanto a los costos sociales de la incursión del paramilitarismo en el departamento del Cesar, la realidad es inocultable: los métodos de implantación fueron brutales, y las cifras de masacres, asesinatos selectivos, secuestros y desplazamiento se dispararon (Rangel, 2005, p. 15).
En principio, siendo foráneos los grupos paramilitares que se establecieron en el Cesar, no contaron con un mínimo de consenso a su favor en el momento de su arribo. Su acción retaliadora no discriminaba, pues pretendieron posicionarse en poco tiempo y consideraron que los excesos cometidos con anterioridad por la guerrilla eran suficiente justificación. Lo que se insinuó luego, a medida que sus acciones iban debilitando el poder de la guerrilla, fue la existencia en el fondo de una trinidad de poder: narco-para-políticos locales y regionales (Rangel, 2005, p. 16).
Dentro del contexto regional, es importante identificar las relaciones entre los entes económicos del...

Índice

  1. Cubierta
  2. Portada
  3. Créditos
  4. Contenido
  5. Presentación
  6. Introducción
  7. El escenario etnográfico: ¡Utopía, un proyecto que sirve para empezar a caminar!
  8. Relatos de vida. Narrativas de ensueño, nostalgia y muerte
  9. Las narrativas del conflicto armado en los relatos de vida
  10. Conclusiones
  11. Bibliografía