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LA CLAVE NO. 1 DE LA ACTITUD DE EXCELENCIA: EL DESARROLLO DEL LIDERAZGO DINÁMICO
Produzca líderes en todos los niveles de su organización. Las empresas cinco estrellas reconocen lo positivo que resulta desarrollar líderes en todos los niveles de gestión y de potencializar a sus empleados para hacer lo que sea posible con el fin de servir a sus clientes. Las organizaciones de éxito reconocen que antes de poder dirigir a muchos, se debe estar en capacidad de dirigir a un solo individuo, ¡a usted mismo!
¿Por qué algunas organizaciones logran destacarse por encima de la competencia? ¿por qué algunas alcanzan un estatus de cinco estrellas mientras que otras no? Las empresas y organizaciones de segundo nivel trabajan muy duro, pero el éxito de cinco estrellas los esquiva. Me sentí muy intrigado por este dilema, de modo que me propuse encontrar las respuestas.
Así que contacté organizaciones cinco estrellas y entrevisté a sus líderes. Descubrí que todas estas compañías tienen entornos similares y habían desarrollado una cultura que inspiraba una actitud de excelencia. Y dado que recibo invitaciones para hablar en organizaciones de excelencia en todo el mundo, he estado en condiciones de observar, investigar y reunir información con respecto a los principios que separan a las grandes compañías de sus competidores menos afortunados.
La búsqueda de la excelencia fue la principal constante que hallé tanto en la vida personal como profesional de las personas que componen estas organizaciones exitosas. Esto me conduce a mi primer punto, el que con frecuencia se suele pasar por alto cuando de alcanzar el éxito se trata: Las mejores compañías siempre deciden contratar a individuos capacitados y estimulan en ellos el desarrollar de las cualidades de líderes de excelencia en todos los niveles de la organización. Los grandes equipos deportivos siempre intentan contratar, adquirir y llevar al campo de juego a los mejores jugadores, y lo mismo se aplica en los grandes negocios. Ellos saben que la gente excelente es la clave para construir organizaciones sobresalientes.
¿CONTRATAR, ADQUIRIR O DESARROLLAR?
Recientemente fui invitado a dar el discurso de conclusión en una conferencia internacional de liderazgo, en una reconocida multinacional de computadores. Asistí al evento un día antes para poder escuchar a otros presentadores que también habían sido invitados, pues proponían algunos puntos muy interesantes que yo quería conocer. La noche anterior a mi discurso, tuve una cena con el director del programa, en esa cita aproveché para expresarle que estaba asombrado con el evento que habían organizado y agradecí por estar incluido en la selección de oradores; además, le dije que estaba intrigado en saber por qué su compañía había gastado tanto dinero en esta reunión y por qué había hecho semejante inversión para un reducido grupo de personas, aproximadamente trescientos de sus gerentes más importantes.
En respuesta recibí un argumento muy válido relacionado con los principios del éxito: “Queremos ser los mejores del mundo en todo lo que hacemos. Queremos ser líderes en nuestro campo, y para lograr ser los mejores, debemos tener a las mejores personas. ¡Y si no las podemos contratar, entonces tenemos que producirlas!”.
Todo lo que yo pude decir fue: “¡Genial!”. Se trató de un momento de absoluto acuerdo porque aquello puso sobre el tapete uno de los secretos mejor guardados de las compañías o empresas exitosas: Las compañías cinco estrellas siempre inician con personas cinco estrellas o procuran contratarlas, adquirirlas o desarrollarlas; si no las pueden contratar, entonces toman excelente materia prima y la convierten en diamante. El secreto está en que estas compañías deciden conseguir el mejor personal con el fin de obtener los mejores resultados.
Las empresas líderes invierten de forma constante y consistente en el crecimiento y desarrollo de su fuerza laboral. Saben que si quieren aumentar las ganancias, primero deben hacer que su personal crezca. La mejor forma de proyectarse hacia el futuro es crecer a nivel personal. La mejor forma de crecer como organización es hacer que su personal se desarrolle. Las organizaciones más sobresalientes se comprometen a promover el desarrollo de su personal, y esto es así porque entienden que existe una correlación entre el éxito de sus empleados y el éxito de la organización.
DAR ÁNIMO Y SU IMPACTO EN LAS GANANCIAS
Mientras preparaba un programa para la Sociedad de Gerentes de Recursos Humanos, tuve la oportunidad de entrevistar a un buen número de importantes directores de esta área, procedentes de diferentes partes del mundo; le pregunté a cada uno de ellos sobre cuál era la clave para crear empleados felices y productivos. La información que recibí como respuesta resultó ser de un valor incalculable.
Ellos me dijeron que entre más se estimule a los empleados a lograr lo mejor, más se anima su moral y aumenta su productividad. Entre más se motive a los empleados para que se puedan comunicar abiertamente y con franqueza, también se multiplica su productividad.
Del mismo modo, las compañías que encuentran o desarrollan el buen talento están más dispuestas a trabajar con sus empleados más apreciados y a mantenerlos vinculados aun si la vida de estos cambia y necesitan ser reubicados en otras ciudades. Muchas compañías buscan maneras de involucrar nuevas tecnologías para mantener conectados a los empleados con el equipo. Por ejemplo, un gerente lo expresó de la siguiente manera: “Todo el mundo enfrenta obstáculos en la vida. Si logras desbloquear tu mente, pensar en grande y de forma diferente, estás en condiciones de abrir excelentes posibilidades de productividad y de crecimiento, y esto será cierto tanto para la compañía como para el individuo”. La mayoría de los gerentes que entrevisté dijeron que estaban dispuestos a crear formas de mantener a los buenos integrantes del equipo, incluso si estos tuvieran que cambiar de ciudad.
Adicional a ello, las organizaciones que están dispuestas a pensar y a actuar de forma diferente pueden motivar a sus empleados a que se conviertan en los mejores vehículos de promoción para agregar nuevo talento a las mismas. Los empleados felices y motivados están en mejores condiciones de informar sobre dicha situación a sus amigos y, por ende, se convierten en imanes que atraen a gente de gran calidad a la organización.
La empresa Southwest Airlines es un gran ejemplo de este tipo de pensamiento diferente, ellos consideran que su personal es su bien más preciado, su prioridad, y lo definen como “el primer modelo de servicio que se centra en el hecho de que los empleados felices tienden a servir a los clientes con una felicidad mayor”. Herb Kelleher, el fundador de Southwest Airlines, dijo en una entrevista:
“Cualquiera pude comprar un avión, no obstante, nuestro personal es el que hace que nuestra aerolínea sea un éxito. Consiste en darles una experiencia. Yo quiero que mis clientes salgan con una sonrisa en sus rostros y que comuniquen esa sonrisa a todas las personas con las que se encuentren ese día. Este es el secreto… todos nuestros competidores pueden comprar aviones, pero es más bien la experiencia que nuestros asociados dan a los clientes lo que nuestros competidores encuentran difícil de imitar”. (Revista Spirit, junio de 2009).
La libertad para atender a los clientes y divertirse en el proceso es lo que le permite a los asociados de Southwest Airlines cantar, hacer bromas y hasta subirse al portaequipaje y decir “¡Sorpresa!”, cuando este se abre. Esta es la gente que hace que la organización funcione.
Por su parte, los hoteles y resorts Marriot, así como los hoteles y resorts Ritz–Carlton, continúan aumentando su participación en el mercado mientras mejoran las vidas de las personas que trabajan allí. Ellos saben que los asociados felices y entusiasmados tienden a compartir esa felicidad y entusiasmo con los clientes, y también a proveer un mejor servicio. Estos dos gigantes de la hotelería de lujo realizan encuestas con bastante frecuencia, una de ellas es para determinar los niveles de satisfacción de los clientes, y la otra, para establecer el nivel de satisfacción de sus asociados. A propósito, las personas que trabajan en Marriot y Ritz–Carlton no son consideradas “empleadas” sino como “asociadas,” esto significa que son socias en hacer que el hotel sea un éxito.
CONTÁGIESE DE LA ACTITUD DE EXCELENCIA
La excelencia consiste en comprometerse a hacer lo
que es correcto, en el momento correcto, de la forma
correcta; es hacer las cosas de una manera mejor a
como siempre se han hecho; es eliminar los errores; es
conocer todos los lados de un asunto; es ser cortés; es
ser un ejemplo; es trabajar por el amor al trabajo; es
anticiparse a las solicitudes; es desarrollar recursos;
es reconocer que no existen impedimentos; es dominar
las circunstancias; es actuar desde la razón más que
desde la norma; es conformarse con nada menos que
lo mejor de nosotros.
—Marshall Field & Company
Si nuestra meta es crear una cultura de excelencia debemos captar lo que significa tener “Actitud de excelencia”. Es esencial empezar conociendo la visión de la organización. Es muy posible alcanzar las metas que otros consideran imposibles cuando los empleados captan la visión de la compañía y van en pos de ella con una actitud de excelencia.
Pero para que un equipo de trabajo se conecte con la visión de la empresa, alguien tiene que venderle primero la esencia de esa visión de la empresa. Y antes de que usted pueda hacer eso, tendrá que haberse vendido primero esa visión a uste...