Sermones temáticos sobre Jesús y los Evangelios

John MacArthur

• Editorial: Editorial CLIE
• Año: 2017
• ISBN:
  9788416845453
• Categoría: Theology & Religion
• Categoría: Religion

Seleccionados y escogidos de las distintas predicaciones temáticas, contiene sermones para poder predicar una serie temática por un año completo sobre Jesús y los evangelios en la Biblia. Para incidir en el conocimiento y la formación bíblica de los creyentes. Predicados con el estilo y base bíblica que caracterizan las predicaciones de John MacArthur: revolucionar los corazones y vidas por medio de la palabra predicada.

II PARTE

Sermones temáticos sobre los Evangelios y la Salvación

Septiembre 1, 2011

13_El Glorioso Evangelio

Por lo cual, teniendo nosotros este ministerio según la misericordia que hemos recibido, no desmayamos. Antes bien renunciamos a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino por la manifestación de la verdad recomendándonos a toda conciencia humana delante de Dios. Pero si nuestro evangelio está aún encubierto, entre los que se pierden está encubierto; en los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios. Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo como Señor, y a nosotros como vuestros siervos por amor de Jesús. Porque Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo.

Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros, que estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperados; perseguidos, mas no desamparados; derribados, pero no destruidos; llevando en el cuerpo siempre por todas partes la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestros cuerpos. Porque nosotros que vivimos, siempre estamos entregados a muerte por causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestra carne mortal. De manera que la muerte actúa en nosotros, y en vosotros la vida.

Pero teniendo el mismo espíritu de fe, conforme a lo que está escrito: Creí, por lo cual hablé, nosotros también creemos, por lo cual también hablamos, sabiendo que el que resucitó al Señor Jesús, a nosotros también nos resucitará con Jesús, y nos presentará juntamente con vosotros. Porque todas estas cosas padecemos por amor a vosotros, para que abundando la gracia por medio de muchos, la acción de gracias sobreabunde para gloria de Dios.

Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día. Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria; no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.

2 Corintios 4:1–18

BOSQUEJO

— Introducción

— El glorioso evangelio

— La superioridad del nuevo pacto

— El ministerio como misericordia

— La necesidad de un corazón puro

— Comprometido a predicar con precisión

— Los resultados dependen de Dios

— Lo insignificante de tu persona

— Los beneficios del sufrimiento

— La necesidad de convicción

— Oración

SERMÓN

Introducción

La verdad divina es la cosa más importante que existe. Por medio de ella somos salvos, santificados, y por medio de ella se nos da la esperanza de la gloria. Por medio de ella entendemos lo que Dios requiere de nosotros, y por lo tanto entendemos qué es lo que debemos obedecer, y qué es lo que debemos de ser. Ella es el camino a la bendición en la vida y a la recompensa en la eternidad. Así que la verdad importa más que ninguna otra cosa. Dios es verdadero. La Escritura dice, “sea Dios veraz, y todo hombre mentiroso”. Dios no puede mentir. Cristo es la verdad. El Espíritu Santo es el Espíritu de verdad. Y Jesús dice acerca de la Escritura que la palabra de Dios es verdad, “tu palabra es verdad” (Juan 17:17).

Estamos aquí para adorar en verdad —como Jesús nos instruyó— para creer la verdad, para hablar verdad, para meditar en la verdad, para entender la verdad, para caminar en la verdad, para amar en verdad, para deleitarnos en la verdad y para obedecer la verdad. Todo esto se trata de la verdad, de hecho, sería mejor llamarnos Iglesia de la Comunidad de la Verdad en lugar de Iglesia de la Comunidad de la Gracia, porque esto es lo que es el corazón de la iglesia: la verdad. Las cosas suceden en verdad. Esto es lo que es la verdad; es la realidad, y Dios es el autor de la verdad. Él ha determinado lo que es verdad y Él es el revelador de lo que es verdad.

Desde luego que la Biblia es verdad, ella contiene la verdad acerca del Dios verdadero, el verdadero Cristo y el verdadero Espíritu Santo. Contiene todo lo que necesitamos saber, y es un recurso inexhaustible de verdad.

Yo he pasado 43 años estudiando el Nuevo Testamento versículo a versículo. Ya concluí el evangelio de Marcos. Pasé un par de años en Marcos. Pasé 10 años en Lucas, ocho años en Mateo, varios años en Juan y el resto del Nuevo Testamento. Y de lo único que me arrepiento es de haberlo hecho demasiado rápido. Esto hizo que me perdiera mucho, porque hay mucho más ahí de lo que he podido ver. Podría volver y hacerlo una y otra vez, pero aun así nunca se agotaría la verdad que ahí se encuentra.

Pero debido a que solo tendremos cuatro días juntos, solo podremos tocar algunos aspectos de la verdad. Aquellos de ustedes que están familiarizados conmigo recordarán que hace algunos años escribí un libro llamado El Evangelio según Jesucristo. Esto fue una gran aventura para mí, y no quiero darles mucho de historia, porque ustedes lo pueden leer por sí mismos. Cuando salí del seminario, había sido bien entrenado para trazar la Palabra de Dios, estudié griego y hebreo, teología, historia de la Iglesia y todas estas cosas. Aprendí cómo trazar la Palabra de Dios, y pensé que sabía cómo debía hacerlo. Estaba preparado para dar una batalla apologética para defender la verdad, había muchas batallas que se estaban preparando en aquel entonces. Pero lo que nunca comprendí, de lo que nunca tuve idea alguna, fue que yo estaría durante mucho tiempo de mi ministerio buscando como hacer que el evangelio fuera más claro para la iglesia; no tanto para el mundo, sino para la confundida iglesia de mis días.

Así que escribí El Evangelio según Jesucristo. Tiempo después El Evangelio según los Apóstoles, el cual respondió muchos argumentos que me fueron presentados cuando escribí El Evangelio según Jesucristo. Después de esto escribí algunos otros libros como Verdad en Guerra y cosas como ésta para regresar a ver la verdad del evangelio, y varios libros más que enfatizan el asunto del evangelio. Sin embargo, hay un libro que aún no he escrito, pero lo voy a hacer. Este será el tercero de la trilogía y se llamará El Evangelio según Pablo. Si ya abrieron su programa habrán notado que éste es el tema de la semana. Esto es lo que me ha sido asignado por los altos poderes de Grace To You (Gracia a Vosotros). Éste es un título adecuado porque el evangelio según Pablo ha estado bajo ataque. Es muy probable que ustedes hayan ya escuchado algo que han llamado “La nueva perspectiva acerca de Pablo”. Esto es la negación de lo que Pablo escribió en el Nuevo Testamento y lo que la iglesia ha entendido que él escribió a través de toda su vida y que fue rescatado en el tiempo de la Reforma.

El evangelio según Pablo está bajo un ataque muy severo. No voy a lidiar con el error, no creo que valga la pena. Si yo les doy la verdad, ustedes mismos pueden notar dónde está el error. Lo que haremos es echar una mirada al evangelio según Pablo, así que estaremos con él un rato. Tenemos mucho material para trabajar. Hemos escuchado mucho de él en el Libro de los Hechos, y también tenemos otras 13 epístolas que él escribió. Como pueden ver hay mucho material que podemos ver con respecto a Pablo.

Él se refiere al evangelio como “el evangelio de Dios”. Lo llama “el evangelio del Dios bendito”. Lo llama “el evangelio de Su Hijo”, “el evangelio de Cristo”, “el evangelio de nuestro Señor Jesucristo”. Lo llama “el evangelio de gracia”. Lo llama “el evangelio de paz”. Lo llama “el evangelio de nuestra salvación”, pero de manera maravillosa lo llama “mi evangelio”. Después lo amplia y le llama “nuestro evangelio”. ¿Cuál era su evangelio? ¿Cuál es nuestro evangelio? ¿Cuál es el evangelio de gracia, de paz, de salvación, de nuestro Señor Jesucristo, el evangelio de nuestro bendito Dios? ¿Cuál es éste? Necesitamos saber lo que es el evangelio, porque éste es el evangelio que nosotros proclamamos.

En palabras que son familiares para nosotros, en Romanos 1, Pablo dice en el versículo 16, “Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego”. Esto es cronológico, pero ¿qué es lo que él predicaba? ¿Qué es aquello que él está dispuesto a predicar? ¿Qué es aquello que él se siente obligado a predicar? ¿Cuál es este evangelio?

Viéndolo de manera negativa por un momento, pueden abrir sus Biblias en Gálatas 1, esto a manera de una corta introducción. Gálatas 1:6: “Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente”.

Dice “estoy maravillado”. El verbo en griego es thaumazo. Este es usado con mucha frecuencia en el evangelio cuando la gente se maravillaba de los milagros inexplicables que Jesús realizó. Esta es la razón por la que Pablo encuentra como algo increíble que alguien haya ya abandonado el evangelio, o bien haya sido arrastrado por un evangelio diferente. Pablo usa la palabra thaumazo debido a dos realidades; una de ellas se encuentra aquí, y la otra está en 2 Tesalonicenses 1:7–10, en donde él describe el regreso de Cristo y lo maravilloso y sorprendente que será cuando Él regrese en medio de llamas de fuego y descargue su venganza sobre aquellos que no obedecieron el evangelio.

Es por esto que se apega a usar esta palabra y la usa solo dos veces. Estoy sorprendido que tan rápidamente ustedes estén desertando, huyendo de Aquel que los llamó. Aquí estamos hablando del llamamiento efectivo, un llamado interno, el verdadero llamado, el llamado de la salvación. Así que aquí estamos hablando acerca de personas que tienen el llamamiento efectivo, esto es, personas convertidas que han sido alejadas y seducidas por otro evangelio. Se han enamorado, de algún modo han sido mentalmente estimuladas por otro evangelio. Y entonces dice en el versículo 7, en realidad no es otro evangelio porque no existe otro evangelio; simplemente hay algunos que están molestándolos queriendo distorsionar el evangelio de Cristo. Entonces llega está advertencia: “Mas si aun nosotros”, este es un pronombre plural que le gusta usar cuando se refiere a sí mismo porque es una manera más humilde de referirse a uno mismo, “nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema”. Maldito, condenado a ser destruido. Es usado también en 1 Corintios 16:22: “El que no amare al Señor Jesucristo, sea anatema”.

Así que la verdad más importante de todas las verdades —y toda verdad es importante— es el evangelio, el evangelio es lo más importante. Es por eso que debemos ver el evangelio de Pablo, el cual es el evangelio del Señor Jesucristo y el evangelio del bendito Dios. Es el evangelio de paz. Es el evangelio de gracia. Es el evangelio de salvación.

El glorioso evangelio

Ahora trataremos de descifrar esto durante los días que estaremos juntos. Pero por el momento hablemos de la gloria del evangelio, el glorioso evangelio. Mañana por la mañana vamos a tener dos sesiones acerca del mismo tema, sobre el evangelio satisfactorio. En la primera hora hablaremos de cómo el evangelio satisface al creyente, y en la segunda hora hablaremos de cómo el evangelio satisface a Dios, y por la noche hablaremos del evangelio reconciliador. Después el sábado por la mañana, tendremos una sesión doble, y el domingo hablaremos del poder del evangelio para hacernos humildes. La noche del domingo tendremos una sesión de preguntas y respuestas donde buscaremos llegar a conclusiones juntando todos los temas. Tendremos un tiempo maravilloso juntos.

Muy bien, entonces en esta primera sesión veremos la gloria del evangelio, y antes que nada quiero que sepan que no voy a intentar poner esto en orden cronológico. Estos son solo impulsos que llegaron a mi corazón al tiempo que meditaba acerca del evangelio, y al hacerlo no he podido escapar de un pasaje en particular que vive en mi alma todo el tiempo. Les confieso que no me he preocupado mucho por saber cuál es el tema, sino que simplemente he querido predicar este pasaje. Me gustaría encontrar una manera de llegar allí desde donde quiera que me pusieran. De hecho, todos los caminos conducen a 2 Corintios 4. Así que abran sus Biblias en 2 Corintios 4.

Estudié 2 Corintios un poco tarde dentro de mi ministerio de enseñanza, pero estoy muy satisfecho con lo que hice. Si hubiera intentado predicar el libro de 2 de Corintios cuando era un pastor joven, no hubiese sido capaz de entenderlo. Se deben tener décadas de ser apaleado para siquiera entender lo que Pablo estaba atravesando aquí. Debes tener años y años de experiencia en el ministerio para entender su corazón en esta maravillosa epístola. Si ustedes quieren ver el corazón y el alma del apóstol Pa...

Índice

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• I PARTE. SERMONES TEMÁTICOS SOBRE JESÚS
• II PARTE. SERMONES TEMÁTICOS SOBRE LOS EVANGELIOS Y LA SALVACIÓN
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