Capítulo I
Diario de bitácora de la Transición
FRAGA, EN UN APRIETO
Los hombres de confianza que rodean al líder de la oposición empiezan a temer que Fraga se ha equivocado con lo de la «abstención activa» en el referéndum sobre la OTAN.
Lo mismo piensan los empresarios que envían todos los fines de mes el talón correspondiente a la calle Génova. Dicen que puede ser la excusa de su descalabro, ya que al adoptar esta tesis queda enredado en la trampa que le ha tendido el PSOE, tanto si gana como si pierde Felipe el referéndum.
MOVIDA EN LA PRENSA
No sólo en la Corte y Villa de los milagros hay movida de periodistas. José María Javierre, consejero delegado de Editorial Sevillana, S. A., y director de «El Correo de Andalucía», piensa dejar la dirección y busca sustituto.
En la capital bética se piensa que tiene casi todos los números Rafael Martínez Durban, director de Radio Popular de Bilbao, al que acompañaría como redactora-jefe Carmen Yanes, de Radio Minuto, de Sevilla. Parece ser que los nuevos socios de la empresa editora están de acuerdo en todo esto.
Por otro lado, Víctor Márquez Reviriego ha mantenido algunos contactos políticos en Huelva hace unas semanas. Objetivo: llegar a ocupar un escaño en el Parlamento la próxima legislatura. Pero parece ser que el periodista baraja dos posibilidades: que se le garantice salir por Madrid en una lista como independiente o encabezar una candidatura independiente en su ciudad natal, Huelva.
LA SEGUNDA REVOLUCIÓN PENDIENTE
El año 1986 va a resultar clave para la credibilidad socialista del Gobierno de Felipe González. Quedan por solucionar o dilucidar una serie de temas fundamentales que tendrán que quedar cerrados antes de las próximas legislativas. A saber:
– El referéndum sobre la OTAN. Una promesa electoral que debe cumplirse y con la que el PSOE se juega mucho.
– El tema de la UMD. Según el ministro Serra, ya tiene solución. Falta ver si esta solución satisface, a la vez, a los militares demócratas y al propio Ejército.
– El reconocimiento de Israel.
– La modernización de la justicia española y el retiro de los jueces conservadores a ultranza.
– Una política de empleo que aminore las escalofriantes cifras de paro.
– La reducción de las tropas USA en España.
– La puesta en marcha de la TV privada.
Este calendario, de cumplirse o realizarse, constituirá toda una revolución, la «Segunda revolución pendiente», como la designan ciertos sectores críticos del socialismo.
Si se lleva a cabo, Felipe González ganará otra vez las elecciones con un margen más escandaloso que el de octubre del 82. Y será el fin de Fraga. Los próximos diez meses van a ser de órdago.
EN ALZA
Dos nombres son objeto de comentarios en los mentideros políticos de la Villa y Corte: el recién elegido «Tonto del año» por una tertulia de periodistas y escritores, Luis Solana, el de la Telefónica, y el actual alcalde de Barcelona, Pascual Maragall.
Se dice que a finales del 86, después de las generales, ocuparán una cartera ministerial en el Gobierno socialista.
VEINTICINCO MIL POBRES DE SOLEMNIDAD
En un estudio presentado por la dirección general de Acción Social, del Ministerio de Trabajo, y Cáritas Española, que lleva como título Transeúntes y Albergues, existen en nuestro país 25.000 transeúntes, epígrafe que encierra su auténtica situación: pobres de solemnidad.
El estudio tiene como objetivo conocer cuál es la situación de este colectivo marginado, cuáles sus necesidades y cuál es la situación de los albergues o casas de caridad que se dedican a acogerlos.
Los datos más significativos del estudio sociológico son los siguientes: aproximadamente, existen unos 25.000 «transeúntes»; hay un claro predominio de varones; sufren una pobreza severísima; no constituyen un grupo humano integrado y no establecen lazos entre sí; tienen un desarraigo en todos los aspectos afectivos, sociales, económicos, etc.; dos tercios de este colectivo son alcohólicos; a los dos o tres años de encontrarse en esa situación sufren generalmente un proceso irreversible; generalmente son personas pacíficas; sólo un mínimo porcentaje ha pasado por la cárcel.
Según este estudio, los «transeúntes» frecuentan los albergues, los roperos, las instituciones asistenciales, comedores, etc., con el fin de cubrir sus necesidades primarias. Hasta la fecha los albergues han sido generalmente privados, aunque cada vez son más los ayuntamientos que dedican medios para atender a estas personas.
Y aquí a nadie se le cae la cara de vergüenza.
EL AMIGO ITALIANO
Ha sorprendido a la parroquia la irrupción del italiano Berlusconi en la compra de las acciones de los Estudios Roma. Los periódicos de la capital han publicado este hecho, pero no han dicho quién es este señor.
«Fininvest» es un grupo propiedad de la familia Berlusconi que opera en diferentes sectores económicos: inmobiliario, seguros, televisión, editorial, publicaciones y otros.
La actividad en el sector de la televisión es una de las principales de este grupo industrial italiano, que es el primero en su país y el cuarto a nivel mundial en televisión privada. Sus tres canales privados –«Canal 5», «Italia 1» y «Retequattro»– tienen una audiencia diaria total de 43 millones de telespectadores. El número de colaboradores de este fuerte grupo es de 6.000 personas, de las que 2.000 están dedicadas a actividades televisivas.
De su actividad industrial destaca la publicación y edición de «Il Giornale», diario que dirige el periodista Indro Montanelli. La cabeza visible en España ha sido Valerio Lazarof, y el que ha firmado esta adquisición, el señor «capo» Silvio Berlusconi.
Los Berlusconi se comenta que han cumplido cierto papel en la televisión francesa privada, que ha puesto en marcha un equipo de Mitterand. Se cree que en España los Berlusconi son una pantalla de otro grupo español todavía no identificado, pero sí adivinado. ¿Se lo imaginan?
LA GUERRA DE LAS ENCUESTAS
Aquí, quien no corre vuela, repiten los castizos madrileños ante el espectáculo de las encuestas encontradas referente al posible resultado del referéndum sobre la OTAN o, como suele decirse ahora, la Alianza Atlántica.
La guerra es a muerte y está en juego el prestigio de los grandes de la opinión pública. Julián Santamaría da vueltas a las palabras y frases en las encuestas oficiales del CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas) y ha entregado al presidente González una encuesta esperanzadora: el referéndum se gana.
Juan Díez Nicolás dice lo contrario, que el sentido del voto, en este asunto, se mantiene con rigidez pétrea. Repasa los datos de su más reciente sondeo: «únicamente el 23 por 100 de los españoles declara su disposición a votar a favor de la permanencia en la OTAN, en tanto el 41 por 100 se empecina en la negativa». Hay poco que pescar en la cesta de los indecisos, desde luego no para cambiar el resultado. «Incluso una propuesta con unas alternativas recibe, en el mismo sondeo, el rechazo de la opinión pública. El 11 por 100 de los españoles apoyan la permanencia total de España en la Alianza, incluida su estructura militar, y otro 16 por 100, la permanencia pero fuera de la estructura militar».
En su conjunto, el 27 por 100 contra el 36 por 100 que pretende sacar a España de la Alianza. El referéndum se pierde.
Los estrategas del PSOE han cuantificado el probable voto negativo en el referéndum sobre la permanencia de España en la OTAN. Sobre datos pormenorizados, provincia por provincia, y con todos los indicadores obtenidos de las encuestas de Santamaría, estiman que unos dos millones de españoles acudirán a las urnas para decir «no». Ganar el referéndum se convierte, pues, en una campaña de persuasión para que más de cuatro millones de españoles acudan a las urnas. Con el 30 por 100 de participación, concluye, se ganará el referéndum. Y esperan el voto de más del 35 por 100, quizá el 40 por 100 de los electores. Este último porcentaje daría una victoria cómoda al «sí» y dejaría en ingrata posición a Fraga y su propuesta de «abstención activa». Estas son las cuentas del PSOE.
El propio Fraga cree que el voto favorable a la permanencia en la OTAN superará al contrario, pero el alto volumen de abstención supondrá el deterioro para los socialistas en el poder. La hipótesis de que ganen los partidarios del «no» se rechaza lo mismo por los dirigentes socialistas que por los aliancistas.
González, a los tres años de llegar al poder, ha explicado que se equivocó y que los intereses de España están mejor defendidos dentro de la OTAN. Pero un significativo sector de su partido, como los marxistas, sigue pensando como antes, que España debe estar fuera de la Alianza y que el referéndum debe servir para conseguir ese objetivo. Los marxistas quieren aprovechar esta ola, que paradójicamente les ha brindado el propio González manteniendo la promesa del referéndum, para favorecer las posiciones de su izquierda crítica. Solicitan un contraste de opiniones y argumentos con el presidente González en televisión, para desgastarle con un repaso de hemeroteca. Pero el debate tendrá un lugar el 4 de febrero en el Parlamento, donde los críticos se encuentran en una minoría marginal. Sin embargo, el hecho de que este debate, por su trascendencia, vaya a ser televisado en directo, no parece una razón de peso para que TVE deje de producir coloquios sobre el mismo tema con participación plural.
La izquierda anti-OTAN ya ha conseguido que González declare pol...