Corazón de mujer

María Castejón Sánchez, José Luís de Montsegur

• Editorial: Kolima Books
• Año: 2015
• ISBN:
  9788416364466
• Categoría: Personal Development
• Categoría: Self Improvement

Corazón de Mujer, es un tratado integral sobre la Mujer y su poder interior especialmente dirigido a las mujeres que han sufrido o sufren cualquier forma de maltrato, físico o psicológico. Es un libro no dirigido únicamente a mujeres sino también muy relevante para que los hombres entiendan mejor a sus parejas, compañeras o amigas.

XII

El sistema energético humano

El sistema energético humano consta de un campo de fuerza invisible al ojo no adiestrado para ello que rodea a todos los seres vivos.

Una parte importante de esa fuerza es la manifestación del aura.

El aura es un envoltorio alrededor del cuerpo, un halo de energía que actúa como una burbuja protegiendo la fuerza vital.

Cuando el cuerpo se mantiene sano, el aura permanece impecable, luminosa y llena de vitalidad protectora, pero cuando la salud es frágil y la mente tiene emociones tormentosas, el aura se debilita mostrando vías abiertas, como roturas que pueden permitir el paso de agentes patógenos al interior del organismo humano, produciendo principios de inestabilidad y desequilibrio en la salud general.

El sistema energético humano consta de siete capas de energía dentro del aura. En la primera capa del aura, la más cercana al cuerpo físico, se encuentran los «chacras».

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Los chacras

La palabra «chacra» viene del sánscrito antiguo y significa «rueda de luz».

Son como un torbellino de energía giratoria que se crea con la energía magnética del núcleo de la tierra que asciende, y la energía eléctrica que desciende del cosmos. Esta rueda, formada y retroalimentada por ambas fuerzas en combinación con nuestra propia energía (sumando a ésta la de los pensamientos, emociones y acción), hacen posible que nuestra fuerza vital se mantenga sólida y en continuo crecimiento estabilizando la salud.

Estos campos energéticos, los chacras, están íntimamente ligados a la conciencia humana, de modo que en función de nuestras emociones, espiritualidad y acciones, su energía fluctuará, activándose o debilitándose.

Existen muchos chacras en nuestro cuerpo, pero los principales son 7 que se hallan situados a lo largo de la columna vertebral. Cada uno está relacionado con órganos y sistemas de nuestro cuerpo, y a la vez con emociones y con la actividad física, psíquica y espiritual. Es interesante conocerlos a fin de comprender mejor nuestra totalidad, la sensibilidad y el afinamiento de nuestro organismo, de nuestro cuerpo y la intercomunicación total de lo interno con lo externo, de lo visible con lo invisible, de lo macro con lo micro, de lo sutil con lo muy perceptible.

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Los tres primeros chacras

• Primer chacra «raíz»

Su color es el rojo, su sonido el tambor, su elemento la tierra. Está situado en el perineo, en la base de la columna vertebral. A los 7 años ya está formado.

El chacra raíz necesita cualquier tipo de actividad física, yoga, danza, gimnasia, artes marciales o cualquier disciplina que implique paciencia y movilice las piernas. La esperanza a través de recuerdos y aportes positivos es fundamental para no caer en su aspecto negativo, «la víctima». A la víctima le faltan fuerzas para afrontar lo menos positivo, negándose a programarse para estimular la voluntad que de natural ya posee. Cuando está en su fase negativa, la víctima se suele desbordar con circunstancias externas y suele vivir de la caridad y la generosidad de personas o instituciones. Son muchas las causas por las cuales una persona llega a estos estados de dejadez, donde pierde su raíz y con ello su poder y seguridad en las causas más importantes y se incluye el miedo, la culpabilidad, y la baja autoestima.

La función primordial de este chacra está relacionada con tratar de vivir una vida plena, llena de vitalidad, donde la seguridad es muy importante para su equilibrio. Nos aporta paciencia y vista a la hora de discernir sobre la elección de cosas importantes para que el caos no enturbie nuestro bienestar y la realización de nuestros sueños. Es el chacra más ancestral, el que nos marca la lucha por la vida en alerta natural para la supervivencia.

Este chacra influye de forma definitiva en la corteza suprarrenal.

La corteza suprarrenal es la parte externa de las glándulas del mismo nombre, donde se producen corticosteroides que son los que mantienen equilibrados los niveles de acidez y alcalinidad en nuestra células; controla la actividad cardiaca, estimula la función del glucógeno y la glucosa en el riñón, y regula el flujo de adrenalina responsable de nuestra respuesta ante un peligro.

El riñón, en la medicina china está íntimamente relacionado con la energía ancestral o el caudal de vitalidad heredada de nuestros padres y ancestros.

Cuando nuestra raíz es fuerte, tenemos nuestro propio punto de vista y decisión, no nos dejamos influir por la familia, ni por la raza, ni por el estatus social, la política, las religiones o las sugerencias de nadie. A través del chacra raíz es posible el ascenso a las funciones y la vitalidad del segundo chacra, el sacro.

El chacra raíz está en relación con la zona baja de la espalda, el coxis y el sacro.

En él están representados todos los problemas familiares y de supervivencia no resueltos. De este chacra surge la confianza o la independencia personal, así como nuestras raza e identidad sexual.

Pero, en último extremo, esta independencia personal depende mucho de la educación recibida en los primeros años de vida, del nivel social y de tradiciones ancestrales que pueden imponernos que la familia es lo más importante, y que en caso necesario, hay que sacrificarlo todo por ella, incluso, llegado el caso, sacrificar la felicidad propia con tal de que el honor familiar no se ponga en entredicho.

El maltrato, el abuso sexual, o la desatención en la infancia, dejan una huella de indefensión a veces difícil de reconocer pues la víctima suele disculpar a los maltratadores o abusadores, mientras se inculpa a sí misma por la creencia de que ella ha sido quien lo ha «provocado».

La aparente estabilidad familiar se sostiene haciendo siempre que todo siga igual, fiestas, cumpleaños, vacaciones. El aspecto de cohesión es lo que más importa. Los líderes de la familia, padres, madres o abuelos, defienden su forma de ver y llevar el grupo, aunque ésta sea nociva para la libertad de alguno de sus componentes.

Cuando no se puede desconectar del grupo familiar tóxico, por creencias inducidas desde la niñez y se siente faltar la libertad pero no se es capaz de dar el paso para el cambio, suele haber problemas de salud en toda la zona lumbar inferior, ciática, tumores rectales, hemorroides y dolor desde la quinta vértebra lumbar hacia el sacro.

▪ Segundo chacra, el «sacro», sexualidad y economía

Su color es el naranja, caliente sensual, apasionado y entusiasta, «pura vitalidad».

Se sitúa a 5 o 6 centímetros por debajo el ombligo coincidiendo con los puntos de energía 4 y 6 del meridiano de acupuntura «vaso concepción».

Tiene relación con los ovarios y los testículos. También requiere actividad física en la que el ritmo y el movimiento de piernas y caderas es fundamental. La danza del vientre, los bailes latinos o el jazz son especiales para el equilibrio energético de este chacra además de que benefician el sistema hormonal.

El chacra sacro necesita flexibilidad y fluir, ya que su elemento es el agua; por ello las emociones le harán bailar de un lado para otro, proporcionándole equilibrio o desequilibrio, con lo cual el sistema inmune siempre se verá potenciado o disminuido.

A este chacra le gusta saber que somos totalmente independientes y en ello influye la capacidad para dar y recibir placer y alegría sintiendo bienestar emocional y salud.

Su fase negativa es la «mártir». Cuando la persona abandona su poderío, su disfrute y abundancia, se convierte en mártir haciendo todo lo contrario de lo que es su naturaleza sana, privándose de los placeres de la vida porque cree no merecerlos, sintiéndose culpable y engañada, sufriendo y haciendo sufrir a otras personas, sobre todo a las que más le apoyan.

Este chacra influye poderosamente en la reproducción.

Es el chacra reproductor de la vida. Se desarrolla y estabiliza a los 14 años. Nuestra actitud en relación a la sexualidad es muy importante, ya que las glándulas reproductoras –los ovarios en la mujer y los testículos en los hombres– pueden verse afectadas en su funcionamiento y fertilidad por traumas o concepciones equivocadas sobre la sexualidad, por caus...

Índice

• Portada
• Título
• Copyright
• Poema
• Prólogo
• Nota informativa
• El propósito de este libro
• Poema
• Introducción
• I
• II
• III
• IV
• V
• VI
• VII
• VIII
• IX
• X
• XI
• XII
• XIII
• XIV
• XV
• XVI
• XVII
• Autores
• Notas