Inspiradores Latinoamericanos

De emprendedores a líderes empresariales. 14 testimonios

Alexis Jano Ros

• Editorial: Granica
• Año: 2019
• ISBN:
  9789506418373
• Categoría: Business
• Categoría: Entrepreneurship

Aunque no se definen a sí mismos como inspiradores, lo son. Se trata de catorce entrevistados cuyos testimonios, recogidos en sus propios países, aportan visiones, ideas, creencias, métodos de trabajo, valores y modelos de análisis a partir de sus fuertes liderazgos. Desde una perspectiva latinoamericana son casos de estudio vitales y motivadores que plantean sus "fórmulas" casi sin proponérselo.

Germán Efromovich, presidente del Grupo Synergy y presidente de la Junta Directiva de Avianca Holdings S. A., Colombia

En alas de lo imposible

El encuentro se pactó a las siete de la mañana en el hotel JW Marriott, ubicado en el distrito financiero de Bogotá. Allí estaba su director de seguridad, discretamente amable, cumpliendo la rutina de recepción de visitas. Ni siquiera hubo tiempo para una charla, porque cinco minutos después se presentaba Germán Efromovich, quien con sus gestos expresaba con naturalidad una invitación a desayunar.

Su primera evocación surgió a solas, en un espacio privado del elegante edificio. Como cada día, el protagonista de su memoria fue Peretz, conocido como don Perce, el padre sobreviviente del Holocausto polaco que debió correr kilómetros incalculables a través de bosques espesos mientras soldados nazis le disparaban ráfagas de ametralladora. Cuando llegó a la frontera con Rusia sintió que su vida le pertenecía otra vez, pero no: al otro lado lo aguardaba la inhumana deportación a un campo de trabajo en la Siberia estalinista. La familia de su madre, Clara, era pobre, pero la subsistencia en la aldea de Sarnaky dependía principalmente de lo que compraba y vendía su abuela, una mujer rebelde y analfabeta que aprendió a negociar para darles de comer a sus hijos.

“En la invasión de 1939, los nazis ocuparon la casa de mi abuelo paterno como cuartel general. Le hicieron cavar su propia sepultura y lo fusilaron frente a los suyos. También asesinaron y quemaron a mi abuela y a mi tío. Mi papá se salvó de la matanza porque lo separaron para llevarlo a un campo de concentración. ¡El nazismo fue salvaje!”, evoca Germán Efromovich (1950), en polaco original Efromowicz, un dato que lo conmovió cuando necesitó conseguir información familiar para sacarse el pasaporte de la Comunidad Europea.

Nacido en La Paz, capital administrativa y sede del gobierno de Bolivia, vivió su infancia y primera juventud en Arica, en la árida frontera norte de Chile con Perú, donde Peretz fue representante de las afeitadoras Remington y de las primeras máquinas de escribir Hermes Baby. “Mi casa era un contenedor, ¡de esos que se ven en los puertos! Al frente había una pared, cuatro escalones y una puerta verde. Atrás supuestamente estaba la casa, pero había sido tirada, o sea que no había nada de nada. En total eran doce contenedores, con tres baños en el fondo. Mi cama era un baúl negro con un pequeño colchón encima. Aquella fue una vida dura, pero fuimos felices y recibimos el ejemplo de nuestro padre. Con él supe que el trabajo puede cambiar nuestras vidas, que la persistencia es imprescindible para avanzar. Siempre insistía en que un apretón de manos y una mirada a los ojos valían más que cualquier contrato.”

Los Efromovich emigraron en 1964 a San Pablo, Brasil, cuando ganó las elecciones el democristiano Eduardo Frei Montalva (1964-1970). “Mi papá dijo: ‘Este señor perdió ahora, pero ganará en las próximas y habrá problemas. Debemos irnos lo antes posible’. Se refería a Salvador Allende. No lo odiaba, pero sabía que su gobierno era inevitable y que las cosas se podrían complicar.”

En la mayor urbe industrial de Brasil y América del Sur, Germán Efromovich fue vendedor de enciclopedias puerta a puerta y en colegios, mientras doblaba películas del inglés al español y melodramas mexicanos al portugués. “Mi padre tenía una tienda de confecciones, la actividad más típica de los judíos en aquella época, que además le aseguró un buen retiro. La situación económica no era mala. En San Pablo nos dedicamos a estudiar.”

Germán Efromovich aún no se había graduado de Ingeniería Mecánica en la Universidad de Brasil (FEI), cuando creó un instituto privado para adultos en la cercana ciudad de São Bernardo do Campo. “Así nos vinculamos a la Escuela Madureza, donde las personas que no tuvieron oportunidad de estudiar en su niñez y juventud se formaban para postular a un examen y conseguir su diploma de bachillerato. En 1975, cuando me gradué de ingeniero, vendí la escuela, que entonces ya contaba con 1500 alumnos y 60 profesores.”

“Me he creado las oportunidades que he tenido en la vida”, asegura Germán Efromovich mientras describe su primer negocio comercial: una productora de huevos de codorniz que exportaba frozen y frozen quails gracias a una incubadora que construyó con sus manos. “Una de las enseñanzas que me quedó de esos años fue creer en lo imposible. ¡No hay imposibles! Si hacemos las cosas con pasión, no existe el trabajo que nos frustre, que no nos guste. No le temo a eso que otros le llaman fracaso, aunque no he tenido éxito en todo lo que he emprendido.”

Cuando la charla alcanzaba una dimensión insospechada, sonó fuerte un teléfono celular: “Ya bajo. ¡Estoy bajando!”, dice.

—¿Sabe que tengo un problema? Tenemos que marcar otra fecha para la entrevista porque me agendaron una presentación…

—Pero tendría que ser hoy, porque me voy mañana —respondo sin ocultar mi preocupación.

—¿A qué hora se va?

—A las cuatro de la tarde, rumbo a Cali, para realizar otra entrevista.

—¿Nos podemos ver en Brasil en unos días?

—Luego de Cali regreso a Montevideo… ¿Usted va a una reunión con un cliente?

—Voy a una presentación con empresarios colombianos…

—¿Puedo ir con usted?

—Buena idea. ¡Seguimos juntos!

De inmediato, sin dudarlo, da una orden: “El periodista sigue con nosotros…”.

La entrevista continúa en su camioneta, rumbo al Club El Nogal de Bogotá, un espacio de referencia para los empresarios colombianos, donde se desarrollaba un encuentro de Líderes para Líderes organizado por el Foro de Presidentes del Club El Nogal, en el que Efromovich era un destacado exponente.

Inició su carrera profesional de ingeniero en el Grupo SGS Brasil, un gigante de la inspección industrial, donde tuvo su primera experiencia en inspecciones de soldaduras y ensayos no destructivos. Ya en 1975 había fundado Korko, una comercializadora vinculada a la importación y exportación de equipos y material no destructivo, la cual se convertiría posteriormente en REM, una división de productos médicos, radiofármacos e industriales del grupo. “En 1977 montamos la empresa Brasitest, dedicada a la inspección de estructuras para instalaciones de exploración petrolera. La verdad, empezamos en un garaje de San Pablo, en tiempos del milagro brasileño, cuando se construyeron industrias, usinas nucleares, petroquímicas, centrales hidroeléctricas… Certificábamos calidad en inspecciones oculares y también utilizábamos rayos X y ultrasonido. A Brasitest le dedicaba todo el día. Era contador, cajero, vendedor, limpiador, ingeniero, ¡hacía de todo!” [se ríe].

Desde entonces no se ha detenido y ha desarrollado múltiples negocios en el mercado petrolero en Brasil yendo a otros países. En 2003 fundó Synergy Group, un conglomerado empresarial con negocios diversificados que cuenta con inversiones en hidrocarburos y energía en Brasil, Ecuador, Colombia, construcción naval, servicios de petróleo e inspecciones técnicas, radioquímica, radiofármacos, agricultura, así como un gran desarrollo y consolidación en la aviación.

“Cuando Petrobras descubrió hidrocarburos costa afuera, me llamaron: ‘Germán, prepare a sus inspectores porque ahora vamos a cubrir plataformas bajo el agua’. Eran grandes profundidades, desde 250 hasta 3000 metros, por lo que nuestros técnicos necesitaban bucear. Me pareció que era fácil, ¡pero no! Me di cuenta de que era mucho más fácil enseñar a un buzo a inspeccionar que convencer a un inspector para que empezara a bucear. Así es que fuimos a buscar buzos.”

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En la invasión de 1939, los nazis ocuparon la casa de mi abuelo paterno como cuartel general. Le hicieron cavar su propia sepultura y lo fusilaron frente a los suyos. También asesinaron y quemaron a mi abuela y a mi tío. Mi papá se salvó de la matanza porque lo separaron para llevarlo a un campo de concentración. ¡El nazismo fue salvaje!.”

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Los servicios de control de calidad eran exclusivos para Petrobras, pero pronto se sumaron otros emprendimientos: construcción y arrendamiento de plataformas petrolíferas, astilleros, plantas de energía y complejos para la investigación y desarrollo en medicina.

“Adquirimos el Astillero Mauá [1999], que estaba totalmente quebrado. Fue la primera gran industria de Brasil, con más de 120 años, creada por el barón de Mauá. Pagamos por ella un dólar, con 700 millones de dólares de deuda. Ahora trabajan 4000 personas. Allí tenemos una grúa flotante que levanta 200 toneladas en la punta; eso equivale al peso de más de tres aviones A-320. Luego adquirimos un segundo y un tercer astillero y explotamos petróleo en el nordeste, con una inversión de un billón de dólares. En 2016 podremos construir superpetroleros, superplataformas y todo lo demás.”

La conferencia en El Club Nogal finalizó cerca del mediodía, luego de las preguntas de un público que le demostraba una admiración espontánea y que necesitaba conocer su “secreto”. La entrevista continuó en la camioneta, mientras íbamos al Edificio Avianca, donde fue la tercera y última parte de un diálogo sumamente fructífero.

Germán Efromovich dice con orgullo que es “ciudadano del mundo”. Le sobran argumentos. Nacido en La Paz, en una familia polaca de fuerte arraigo cultural judío, reconoce ...

Índice

• Sobre este libro
• Portada
• Ediciones Granica
• Créditos
• Protagonistas de nuestro continente
• Presentación
• Jorge Añaños y Tania Alcázar, fundadores de Industrias San Miguel (ISM), Perú
• Luis Bakker Jr, presidente del Directorio de Pronaca (Procesadora Nacional de Alimentos C. A.), Ecuador
• Alfredo Carvajal Sinisterra, presidente honorario y referente de la Organización Carvajal, empresa “multilatina” presente en más de 50 países de América, Asia y Europa, Colombia
• Roberto de Andraca Barbas, presidente de CAP, la mayor compañía chilena de siderurgia y minería del hierro.
• Antonio Del Valle Ruiz, fundador y presidente honorario del Grupo Kaluz, México
• Orlando Dovat, presidente de Zonamerica, Uruguay
• Germán Efromovich, presidente del Grupo Synergy y presidente de la Junta Directiva de Avianca Holdings S. A., Colombia
• Marcos Galperin, fundador y CEO de MercadoLibre la mayor empresa tecnológica de América Latina, Argentina
• Hermanos Julio, Máximo, Alberto y Fernando Ikeda, cofundadores del Grupo San Fernando, Perú
• Enrique M. Pescarmona, CEO de IMPSA, la empresa familiar de mayor crecimiento del mundo. Multilatina, líder global en la producción de energía hidroeléctrica y eólica, Argentina
• Álvaro Saieh Bendeck, economista, emprendedor, empresario. Presidente de Corpgroup. Según la revista Forbes, uno de los líderes de la economía chilena
• Carlos Slim Helú, presidente del Grupo Carso, México
• Alberto Vallarino Clément, presidente del Grupo VerdeAzul S. A., Panamá
• Sobre el autor