Encuentro del cristiano con el ateo o agnóstico
eBook - ePub

Encuentro del cristiano con el ateo o agnóstico

Requisitos éticos y psicológicos

  1. 210 páginas
  2. Spanish
  3. ePUB (apto para móviles)
  4. Disponible en iOS y Android
eBook - ePub

Encuentro del cristiano con el ateo o agnóstico

Requisitos éticos y psicológicos

Detalles del libro
Vista previa del libro
Índice
Citas

Información del libro

Los agentes de pastoral –en sentido lato, todos los cristianos- laicos, clérigos o religiosos, se vienen encontrando en forma creciente, tras la situación de libertad religiosa, ante personas agnósticas, ateas o indiferentes. Estos encuentros los pueden experimentar tanto en las diversas áreas de la vida civil, como en los ámbitos eclesiales. En el primer caso me refiero a las áreas de la vida familiar, el trabajo profesional, las actividades ciudadanas culturales o políticas, las experiencias del tiempo libre, etcétera. En el segundo caso me refiero a situaciones de la vida parroquial o de otros ámbitos eclesiales.Lentamente se va superando en nuestro país la percepción distorsionada entre cristianos de una parte y ateos y agnósticos de otra. Va disminuyendo el prejuicio, por parte de éstos últimos, de que los católicos acostumbran a ser personas más bien pueriles, demasiado dependientes de introyecciones de la infancia, muy escasas entre las personas cultas y científicas. Asimismo va disminuyendo, por parte de los católicos, el prejuicio de que un ateo difícilmente puede ser una persona de alto nivel ético, con altura de miras; y cuyo ateísmo es siempre causado por su comodidad o superficialidad (prejuicio que parece tender a aplicarse más ahora a los católicos). El agente de pastoral eficiente deberá estar exento de tales prejuicios y, al mismo tiempo, tolerará con paciencia las percepciones estereotipadas todavía presentes en parte de los otros no cristianos.En los cinco capítulos de este libro pretendo, como objetivo ayudar al lector cristiano a que logre su aspiración a vivir satisfactoriamente sus posibles encuentros con personas agnósticas, ateas o indiferentes (sea en sus actividades en el mundo, o en ámbitos eclesiales). Asimismo ayudarle a que, a través de estos encuentros, pueda también llevar a cabo su vocación evangelizadora, cuando se hayan compartido previamente –con el familiar, amigo o compañero no cristiano- experiencias o inquietudes con consecuencias humanizadoras.

Preguntas frecuentes

Simplemente, dirígete a la sección ajustes de la cuenta y haz clic en «Cancelar suscripción». Así de sencillo. Después de cancelar tu suscripción, esta permanecerá activa el tiempo restante que hayas pagado. Obtén más información aquí.
Por el momento, todos nuestros libros ePub adaptables a dispositivos móviles se pueden descargar a través de la aplicación. La mayor parte de nuestros PDF también se puede descargar y ya estamos trabajando para que el resto también sea descargable. Obtén más información aquí.
Ambos planes te permiten acceder por completo a la biblioteca y a todas las funciones de Perlego. Las únicas diferencias son el precio y el período de suscripción: con el plan anual ahorrarás en torno a un 30 % en comparación con 12 meses de un plan mensual.
Somos un servicio de suscripción de libros de texto en línea que te permite acceder a toda una biblioteca en línea por menos de lo que cuesta un libro al mes. Con más de un millón de libros sobre más de 1000 categorías, ¡tenemos todo lo que necesitas! Obtén más información aquí.
Busca el símbolo de lectura en voz alta en tu próximo libro para ver si puedes escucharlo. La herramienta de lectura en voz alta lee el texto en voz alta por ti, resaltando el texto a medida que se lee. Puedes pausarla, acelerarla y ralentizarla. Obtén más información aquí.
Sí, puedes acceder a Encuentro del cristiano con el ateo o agnóstico de Ramon Rosal en formato PDF o ePUB, así como a otros libros populares de Teología y religión y Religión. Tenemos más de un millón de libros disponibles en nuestro catálogo para que explores.

Información

Editorial
Hakabooks
Año
2019
ISBN
9788418575228
Edición
1
Categoría
Religión

ENCUENTRO DEL
CRISTIANO CON
EL ATEO O EL AGNÓSTICO


REQUISITOS
PSICOLÓGICOS Y ÉTICOS







Ramón Rosal Cortés

TITULO: Encuentro del cristiano con el ateo o el agnóstico
Requisitos psicológicos y éticos
AUTORA: Ramon Rosal Cortés ©, 2019
COMPOSICIÓN: HakaBooks
DISEÑO DE LA PORTADA: Hakabooks©
FOTOGRAFÍA PORTADA: Facilitada por el autor©
1a EDICIÓN: Octubre 2019
ISBN: 978-84-18575-22-8
HAKABOOKS
08204 Sabadell - Barcelona
+34 680 457 788
www.hakabooks.com
Hakabooks
Quedan prohibidos, dentro de los límites establecidos por la ley y bajo los apercibimientos legalmente previstos, la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento, ya sea electrónico o mecánico, el tratamiento informático, el alquiler o cualquier forma de cesión de la obra sin autorización escrita de los titulares del copyright.
Todos los derechos reservados.
PRÓLOGO
Cuando conocí a Ramón Rosal, hace cuarenta años, una de las cosas que más me llamó la atención de él fue la capacidad de comprensión y diálogo tranquilo con personas que discrepaban de sus convicciones y reflexiones. Era una época (todavía no había llegado el “pensamiento débil”) en que se arrastraba la convicción de hay sólo una manera correcta de pensar y de vivir, y quien no pensara igual que yo –que estoy en lo correcto- o es un tonto ignorante, o tiene mala fe. Se trataba de un pensamiento en blanco y negro (al fin y al cabo, hacía pocos años que había llegado la televisión en color), y no era raro que, a lo largo de un debate, las posiciones tendieran a polarizarse y a ir convirtiéndose cada vez en más duras y dogmáticas. Pues bien, fue en esa época cuando conocí al autor de este libro, y precisamente a raíz de unos grupos de diálogo y reflexión entre cristianos y ateos o agnósticos. En estos grupos, él cuidaba con esmero el clima de escucha respetuosa del otro, y el encuentro de puntos comunes, sin necesidad de negar o amortiguar las diferencias.
De aquellos tiempos, recuerdo una anécdota al respecto que me impactó. Eran las vísperas de la votación de la Constitución, y los católicos –acostumbrados al Estado confesional de la época franquista- aún no habíamos estrenado la libertad religiosa. Las opiniones de los católicos se dividían entre los que consideraban que la Constitución era una buena propuesta, y los que creían que no podían votarla en conciencia, porque no era confesionalmente católica. Había un clima tan tenso y confuso que la Conferencia Episcopal se vio obligada a emitir un comunicado aclarando que los católicos podían votar con tranquilidad de conciencia, tanto a favor como en contra de nuestra Carta Magna, ya que el hecho de no ser confesional no invalidaba los indudables valores que apuntaba. Pues bien: el domingo anterior a la votación y para tranquilizar a los oyentes, durante una conferencia para un grupo de cristianos, Ramón Rosal leyó el comunicado de la Conferencia Episcopal. Inmediatamente, y casi antes de acabar su lectura, varias personas, en distintos puntos de la sala, se pusieron en pie gritando ¡NO! ¡NO! ¡NO!, e iban marchándose de la sala dando un portazo. Yo estaba atemorizada y no tenía claro cómo iba a terminar aquello. Al acabar la conferencia, me acerque al autor a comentarle el comportamiento de estas personas (a los que yo, en mi fuero interno, ya había calificado de energúmenos), y cual no es mi sorpresa, cuando me contesta con toda tranquilidad: “bueno, simplemente es que están expresando su opinión”.
Después, cuando le fui conociendo, comprendí que esa actitud abierta, confiada y respetuosa, formaba parte de su ADN. Creció en una familia en la que había diversidad de posturas religiosas y políticas, pero donde nunca faltó el respeto para cada una de ellas. Quizá por ello, por estar acostumbrado desde pequeño a este tipo de situación, tan poco abundante en la España de la época, se convirtió con los años en un maestro del diálogo con el diferente.
Su postura abierta y confiada, le llevó a crear, en los delicados años de la transición (cuando en nuestro país se empezaba a estrenar la libertad de religión y de expresión así como se estrenaba el mostrar en público la propia posición política y religiosa) un grupo de reflexión ética con un grupo de periodistas que se distanciaban entre sí en esas posiciones, pero que compartían la ilusión por el logro de unos valores éticos que servían de puente para el diálogo, el conocimiento, la comprensión y la valoración de los demás, por muy diferentes que fueran algunas de sus convicciones. A lo largo de los años ha proseguido creando otros muchos grupos de diálogo entre cristianos y ateos o agnósticos en torno a cuestiones éticas o existenciales. Doctor en Psicología, maneja con sabiduría y cuidado la construcción de un clima en el que las personas se puedan expresar con franqueza, sabiendo que van a ser escuchadas y respetadas.
Por esa razón, y porque es una persona apasionada con la tarea evangelizadora, si hay alguien que podía escribir este libro, era él. No ha cejado nunca en insistir a los cristianos –laicos- la tarea del anuncio del mensaje de Jesucristo como una peculiaridad diferencial respecto a otras personas no cristianas, con las que comparten la tarea de buscar un mundo más humanizado. Eso sí, un anuncio del mensaje basado en la propia información, reflexión y asimilación del mismo, o lo que él llama “una fe inteligente”, animando a “dar razón de vuestra esperanza” (1 Pe. 3, 15), como reclamaba el apóstol. No ha cejado nunca de insistir en que precisamente el laicado se encuentra en una posición privilegiada para ejercer esta tarea, al tener una mayor posibilidad que los sacerdotes y religiosos de convivir desde una situación natural con personas alejadas de la fe. Algunas de ellas alejadas por haberse apartado de la Iglesia (más que de Jesucristo) por habérseles presentado, más que el cristianismo, una caricatura del mismo, y también por el antitestimonio de muchos llamados cristianos. Otras, porque ya hoy es posible encontrar, en nuestro país, personas que no han sido bautizadas (ni siquiera con el “bautismo sociológico”, imprescindible hace unas décadas para no ser marginado) y que no tienen la menor noción sobre el contenido de las buenas noticias que anunció Jesús de Nazareth. Buenas noticias que constituyen un tesoro tan valioso y desbordante que los cristianos no podemos guardarnos para disfrutar de él sólo nosotros, sino que, en cumplimiento del encargo de Jesucristo (Mc. 16, 15; Mt. 18, 29), nos toca ofrecer con generosidad a todo aquél que quiera conocerlo y compartirlo.
La marcada disminución del número oficial de cristianos en nuestro país, y especialmente en Cataluña, lugar donde transcurre la vida del autor, no es para él sino una buena noticia, porque esta disminución lógica, a raíz de la libertad religiosa, hace más patente que había un gran número de cristianos sólo de nombre que ahora clarifican su situación. Y sobre todo, porque los cristianos tienen ahora la posibilidad de entusiasmarse con la tarea misionera que pueden ejercer en su propio ámbito cotidiano –profesional, familiar, amistoso- sin necesidad de ir a países lejanos y culturas que no conocen. Llamados a ser levadura en la masa (Mt. 13, 33), urge más que nunca introducir en nuestra sociedad, para esponjarla, la ilusión por abandonar lo viejo y transformarnos en el hombre y la mujer nuevos, la esperanza de que es posible construir unidos un mundo que se acerque más a las propuestas de Jesucristo, maestro que nos enseña a vivir en forma sabia y divinizadora.
El tema que aborda este libro es fruto de la experiencia del autor en su trato con no cristianos a lo largo de muchos años y del acompañamiento a algunos de ellos en su proceso de conversión. Tal experiencia le ha llevado a observar las actitudes y factores que pueden ayudar a suscitar el interés por conocer el mensaje de Jesucristo, y a facilitar el camino de apertura a la acción del Espíritu en una conversión incipiente. Con él el autor pretende estimular y transmitir lo aprendido a los agentes de pastoral –es decir, a todo cristiano, puesto que todos estamos llamados a serlo- para facilitar su tarea de un modo práctico.
La ventaja de haber conocido muy profundamente -a través de su tarea como psicoterapeuta- a muchos y muy variados tipos de personas, y su sensibilidad para ponerse en el lugar del otro es un bagaje privilegiado para observar los factores que contribuyen a facilitar una comunicación fluida y a deshacer prejuicios que impedirían la receptividad comunicativa. Y, a la inversa, los que la obstaculizan y distorsionan. Desgraciadamente, algunos hemos podido contemplar demasiadas veces cómo una mala presentación de la fe cristiana, unas palabras ininteligibles o que dan lugar a confusión y prejuicios, una presentación inoportuna, y sobre todo, unas actitudes humanas de superioridad o incomprensión, han echado a perder los procesos iniciados por algunas personas hacia su con...

Índice

  1. ENCUENTRO DEL CRISTIANO CON EL ATEO O EL AGNÓSTICO