Religio duplex

Misterios egipcios e Ilustración europea

Jan Assman

• Editorial: Ediciones Akal
• Año: 2017
• ISBN:
  9788446044116
• Categoría: Teología y religión
• Categoría: Cristianismo

La ciencia de la religión nace en el siglo XVII a partir de la pregunta por la procedencia de los dioses, el politeísmo y la "idolatría". Hasta entonces se había aceptado la sugerencia bíblica de la coincidencia, en un principio, entre politeísmo y superstición. Sólo cuando se reveló la existencia de un único Dios se pudo evolucionar hacia el monoteísmo y prescindir de los ritos idolátricos.En los inicios de la Modernidad este modelo evolucionista fue muy criticado, pues preferían pensar que al principio había prevalecido la idea, natural y ajustada a la razón, de la existencia de un dios único. Según esta visión, el politeísmo habría sido fruto del surgimiento de las comunidades políticas, cuyos gobernantes utilizaban a los dioses para orientar política y moralmente a sus pueblos. En estas circunstancias la religión original pasó a segundo plano y surgieron los misterios.En el siglo XVII, el antiguo Egipto se erigió en el modelo básico de este desarrollo. Se decía, que aunque los sacerdotes predicaran públicamente el politeísmo en los templos, practicaban en secreto el culto a Isis velada, considerado el primer precedente del "Dios de los filósofos". Durante la Ilustración europea, a finales del siglo XVIII, Lessing, Mendelssohn y otros elevaron esta hipótesis de las religiones dobles a otro plano y los misterios fueron reemplazados por la idea de una "religión humana" universal.Jan Assmann amplía en este libro, con gran coherencia, el concepto de la doble religión desarrollado en publicaciones anteriores como La flauta mágica. Perfila esta idea con la intención de ofrecer perspectivas nuevas en la era de la globalización, aunque afirma que tal vez no constituya una alternativa. La ventaja es que quizá nos permita evitar conflictos violentos ayudándonos a poner en relación las tradiciones religiosas concretas con la necesidad de diseñar una religión humana capaz de trascender a las culturas sin atentar contra la identidad cultural.

III

CONTRIBUCIONES SOBRE LOS MISTERIOS PUBLICADAS EN EL JOURNAL FÜR FREYMAURER

INTRODUCCIÓN

Hay que estudiar las investigaciones realizadas en Viena sobre misterios antiguos y postantiguos en el contexto de un drástico cambio de orientación en la masonería europea. Hasta el año 1782 la masonería se basó en el mito de los templarios; afirmaban descender de la Orden del Temple, cuyos orígenes se retrotraían al Templo de Salomón y su arquitecto (Adon-)Hiram. Pero cuando el convento de Wilhelmsbad rechazó el mito de los templarios en 1782 por insostenible, nació la investigación en torno a temas relacionados con la masonería[1]. Estos son algunos de los títulos más importantes:

[Abate Claude Robin], Recherches sur les initiations anciennes et modernes, París, 1779.

[Cornelius de Pauw], Recherches philosophiques sur les Egyptiens et Chinois, vol. 2, Berlín, 1773[2].

Friedrich Victor Leberecht Plessing, Osiris und Sokrates, Berlín y Stralsund, 1783[3].

Anónimo, Characteristick der Alten Mysterien für Gelehrte und Ungelehrte, Freymaurer und Fremde, aus den Original-Schriftstellern, Fráncfort y Leipzig 1787.

[Johann Gottlieb Hermann], Der Mystagog oder vom Ursprung und Entstehung aller Mysterien und Hieroglyphen der Alten welche auf die Freymaurerey Bezug haben. Extraído de las fuentes más antiguas, recopiladas por ocho francmasones, Osnabrück y Hamm, Perrenon, 1789.

La obra en dos volúmenes de Paul Joachim Siegmund Vogel, Briefe, die Freymaurerey betreffend, publicada anónimamente, es una crítica externa a las teorías sobre los orígenes de los masones. En la primera recopilación, Über die Tempelherren [Sobre los caballeros templarios], Núremberg, 1783, se rechaza la leyenda de los templarios; en la segunda, Briefe über die Mysterien [Cartas sobre los misterios], Núremberg, 1784, se contradice la teoría de Starck, que cree ver los orígenes de la masonería en los misterios antiguos, sobre todo en los egipcios.

En otro documento redactado por especialistas al margen de una agenda específicamente masónica figuran:

Christoph Meiners, Über die Mysterien der Alten, besonders die Eleusinischen Geheimnisse. Vermischte philosophische Schriften III, Gotinga, 1776.

Barón de Sainte-Croix, Mémoires pour servir à l’histoire de la religion secrète des anciens peuples, ou recherches historiques et critiques sur les mystères du paganisme, París, 1784.

Los dos libros sin autor son de Johann August Starck, Ueber den Zweck des Freymaurerordens [Sobre el sentido de la Orden de los Francmasones], Germania, 1781, y Ueber die alten und neuen Mysterien [Sobre los misterios nuevos y antiguos], s. l., s. f. [Berlín, 1783]. Ambos fueron al parecer, junto a los resultados del Convento de Wilhelmsbad, el detonante de la investigación en Viena sobre los misterios.

El espíritu rector de este gran proyecto fue el por entonces famoso mineralogista Ignaz von Born[4]. En opinión de este multifacético investigador, la masonería era sobre todo un medio de comunicación, que ponía en circulación y daba difusión a la ciencia y a la Ilustración. Como Iluminado defendía el programa de la Ilustración y creía que la masonería era el instrumento para hacerlo realidad. Una de las metas de los Iluminados era darle a la masonería un giro científico. Adam Weishaupt afirmaba que su orden era una especie de academia de eruditos y exigía que «cada miembro se inscriba en un campo científico concreto y le dedique sus fuerzas […] debe investigar y coleccionar»[5]. De manera que Born, elegido Maestro de la Silla de «La verdadera concordia», creó las logias de investigación, en las que los hermanos debían fomentar la investigación por medio de eruditas conferencias. También hizo planes para fundar una revista donde publicar las investigaciones llevadas a cabo en el seno de estas logias de investigación. Consideraba a la masonería una «sociedad privada» dedicada al intercambio de ideas al margen del control del Estado; una «sociedad secreta» en la que se cultivaba el saber esotérico y se practicaban ritos secretos. Pero sólo pudo realizar estos proyectos parcialmente. Si bien es cierto que tanto la revista como la creación de logias de investigación fueron aceptadas con gran entusiasmo, se decidió que la revista de la orden no fuera accesible a los «profanos»[6]. Eso tenía la ventaja de que podían sustraerse a la censura estatal[7]. Como demuestra el caso Michaeler, Born mismo ejercía una censura bastante estricta[8]. Además, sólo dieron acceso a las logias de investigación a maestros que habían de investigar exclusivamente temas relacionados con la masonería; una decisión que probablemente no estuviera en la mente de Born[9].

Ignaz von Born presenta el proyecto de investigación de «La verdadera concordia» y enumera algunas de las tesis que constituyen la base de esta empresa (pp. 3-14)[10].

1. Razón y religión. La mayoría de las «religiones y órdenes espirituales» exigen la negación de la razón, es decir, un sacrificium intellectus. En nuestro caso es al revés, la razón debe «hacer valer sus derechos en el ámbito de la religión». En otras palabras, mientras que la mayoría de las religiones se basan en la fe «ciega», la masonería parte de la convicción por medio de la razón, sin ser por ello atea. Esta antítesis constituye un Leitmotiv de otras contribuciones científicas.

2. La masonería corre el peligro de compartir el destino de la religión si se enriquece con ritos y símbolos cuyo significado hay que creer sin necesidad de entenderlos o de reconocer lo que expresan racionalmente. De ahí que haya que volver a los orígenes. Las investigaciones van dirigidas a: a) encontrar las huellas más antiguas del origen [de la Orden]; y b) encontrar cualquier similitud, aunque sea casual, que pudiera tener con sociedades secretas de otros pueblos y épocas (p. 12). No se trata sólo de «relaciones familiares», sino también de «relaciones de similitud» (p. 13). «Con tal fin proporcionamos a nuestros hermanos información sobre los misterios de todos los pueblos: fenicios, egipcios, persas, hindúes, griegos y romanos, cristianos y relacionados con las hermandades de la Edad Media» (p. 13). No se ofrece una genealogía de la masonería, sino sólo «materiales» a partir de los cuales pueda confeccionarse en el futuro la «genealogía de nuestra hermandad […], una historia filosófica de la masonería con sus ramas y las formas que ha adoptado. Habría que distinguir entre los diversos estadios de desarrollo: «recepción, decadencia y modificaciones, circunstancias que rara vez se tienen en cuenta en las investigaciones sobre los misterios» (p. 14). Este renovado interés por los estados de evolución de los misterios se explica teniendo en cuenta la decadencia o conciencia tardía de la logia vienesa, como demuestran multitud de contribuciones. Se percibe el desmoronamiento de la masonería y se quiere remediar esta situación volviendo a los orígenes y analizando el destino de sociedades secretas parecidas.

La masonería se debate entre dos frentes: por un lado tenemos la religión dogmática, sobre todo el catolicismo, y por otro las distintas corrientes dogmáticas existentes en el seno de la masonería, basadas en la fe, en vez de en la investigación y la comprensión. En el Journal für Freymaurer [Revista para masones] se califica a la primera de estas corrientes de «supersticiosa» y la segunda da lugar a la distinción entre masonería religiosa y masonería científica. Tras «La verdadera concordia» y su proyecto mistérico late un cientifismo más o menos explícito[11].

A lo largo de cuatro años se fueron publicando en el Journal für Freymaurer las siguientes contribuciones.

Ignaz von Born, Ueber die Mysterien der Aegypter: 1 (1784), pp. 15-132.

Karl Joseph Michaeler, Ueber Analogie zwischen dem Christen­thu­me der ersten Zeiten und der Freymaurerey: 2 (1784), pp. 5-63.

[Joseph Anton von Bianchi], Ueber die Magie der alten Perser und die mithrischen Geheimnisse: 3 (1784), pp. 5-96.

Ignaz von Born, Ueber die Mysterien der Indier: 4 (1784), pp. 5-54.

Anton Kreil, Geschichte des phythagoräischen Bundes: 5 (1785), pp. 3-28.

Karl Haidinger, Ueber die Magie: 5 (1785), pp. 29-56.

Anton Kreil, Geschichte der Neuplatoniker: 6 (1785), pp. 5-51.

Carl Leonhard Reinhold, Ueber die kabirischen Mysterien: 7 (1785), pp. 5-48.

[Anton Kreil], Ueber die wissenschaftliche Maurerey: 7 (1785), pp. 49-78.

Carl Leonhard Reinhold, Ueber die Mysterien der alten Hebräer: 9 (1786), pp. 56-79.

Augustin Veit von Schittlersberg, Ueber den Einfluss der Mysterien der Alten auf den Flor der Nationen: 9 (1786), pp. 5-42.

Anton Kreil, Ueber die eleusinischen Mysterien: 10 (1786), pp. 5-42.

Carl Leonhard Reinhold, Ueber die grössern Mysterien der Hebräer: 11 (1786), pp. 5-98.

Michael Durdon, Ueber die Mysterien der Etrusker, insonderheit ueber die Geheimnisse des Bachus: 12 (1787), pp. 5-164.

El número 15 lo ocupa la gran obra de Michaeler sobre los misterios fenicios, que no se publicó en el Journal sino como monografía[12], al igual que los discursos de Reinhold, que se acabaron publicando en formato de libro.

Las investigaciones sobre los misterios llevadas a cabo por «La verdadera concordia» hallaron cierto eco tardío en Signatstern, una revista anual de los Rosacruces (es decir, antiiluminada y antiilustrada) publicada entre 1803 y 1821 en 15 tomos[13]. El Journal für Freymaurer sólo estaba pensado para estos, sobre todo para masones de posibles, pero Signatstern pretendía llegar a también a quienes no eran masones. Los ocho primeros tomos sólo contienen reglamentos de la orden e indicaciones procedimentales en relación a los siete primeros grados, pero a partir del noveno tomo se publicaron diez de los tratados más interesantes, a veces completos y otras resumidos, en ocasiones con referencias al autor y otras no:

Tomo 9 (1813), pp. 1-94, Ueber die Mysterien der Aegyptier, de J. v. B de (sic) M. v. St. [= Ignaz von Born].

Tomo 12 (1815), pp. 52-110: Ueber die Magie der alten Perser und die Mithrischen Gehimnisse [sin mención al autor: J. A. v. Bianchi].

Tomo 13 (1821), pp. 40-82: Ueber die Mysterien der Indier, de Br. B…, M. v. St. [= Ignaz von Born].

Tomo 13 (1821), pp. 83-137: Ueber Analogie zwischen dem Christenthume erstern Zeiten und der Freymaurerey, de Br. M*ch**r [Karl Joseph Michaeler].

Tomo 14 (1820), la Introducción reza así: «Se me reprocha que todo lo que se publica en esta parte ya ha sido dado a conocer hace tiempo a través del Journal für Freymaurer […]».

Tomo 14 (1820), pp. 1-64: Über die Mysterien der Hebräer [Carl Leonhard Reinhold].

Tomo 14 (1820), pp. 65-96, Ueber den Einfluss der Mysterien der Alten auf den Flor der Nationen [August Veit von Schittlersberg].

Tomo 14 (1820), pp. 121-146, Geschichte des Pythagoräischen Bundes [Anton Kreil].

Tomo 14 (1820), pp. 147-174: Ueber die Magie [Karl Haidinger].

Tomo 15 (1820), pp. 27-61: Ueber die Eleusinischen Mysterien [Anton Kreil].

Versuch einer Geschichte der alten Ritterschaft in Bezug auf die Freymaurerey, de Br. [Aloys] Blumauer[14].

Los volúmenes publicados por el Journal für Freymaurer fueron recensionados de manera muy polémica en el libro de Leopold Alois Hoffmann Die zwo Schwestern P**...

Índice

• Portada
• Portadilla
• Legal
• Dedicatoria
• Prefacio
• Introducción
• PRIMERA PARTE. LA IDEA DE LA RELIGIÓN DOBLE: HISTORIA Y ACTUALIDAD
• I. Fundamentos egipcios: el doble sentido de los signos
• II. Del doble sentido de los signos a la religio duplex
• III. Religio duplex y teología política
• IV. Religio duplex y la francmasonería
• V. La era de la globalización: religio duplex como doble pertenencia
• Una perspectiva. ¿Religio duplex hoy?
• SEGUNDA PARTE. MATERIALES SOBRE LA INVESTIGACIÓN MASÓNICA EN TORNO A LOS MISTERIOS
• I. Los masones en busca de su pasado
• II. Beyerle y Starck sobre los misterios, la religión doble y la masonería
• III. Contribuciones sobre los misterios publicadas en el Journal für Freymaurer
• Una retrospectiva. ¿Existen las «religiones dobles»?
• Índice de siglas
• Bibliografía