Guía completa para el artista

Equipo Parramón Paidotribo

• Editorial: Parramón Paidotribo
• Año: 2019
• ISBN:
  9788434215108
• Categoría: Arte
• Categoría: Arte general

Ésta es una obra dirigida tanto al aficionado como al profesional, que puede emplearse como herramienta de aprendizaje o bien como libro de consulta para aclarar cualquier duda acerca de los procesos creativos y de los principios que los gobiernan. Así que incluyen todos los materiales, procedimientos y técnicas del dibujo y la pintura, con numerosas explicaciones aclaratorias y procesos paso a paso. Los contenidos de esta obra se han organizado teniendo en cuenta las necesidades y la curiosidad de los modernos dibujantes y pintores para poner en sus manos un libro de verdadera utilidad.

PROCESOS PICTÓRICOS

LA FIGURA HUMANA

La representación del cuerpo humano constituye el núcleo central de la expresión artística. Hablar de figura humana es hablar de la historia del arte entera, pues es el único tema que ha sido tratado en todos los tiempos, países y estilos. El hombre siempre ha pintado al hombre y, al hacerlo, ha expresado su visión global de la vida.

Auguste Renoir (1841-1919), El columpio. La inmensa mayoría de los grandes maestros de la pintura realizaron sus obras maestras con la representación de la figura humana. Ésta ocupa un lugar central en la expresividad artística de todas las épocas.

Clasicismo y modernidad

Como tema central de la expresión artística, la representación de figuras delata las diferencias sustanciales entre épocas y estilos artísticos. Basta comparar una figura medieval y otra renacentista para identificar inmediatamente dos mentalidades casi opuestas. Esto también es válido para estilos individuales. ¿Quién no sabría reconocer el estilo pictórico de un Rubens con sólo ver uno de sus exuberantes personajes femeninos? Pero por debajo de todos los cambios ocurridos en el arte occidental, pervive un substrato común nacido en la antigua Grecia que da sentido y orientación a las representaciones de hombres y mujeres: la forma clásica. Herederos de la Antigüedad, hoy seguimos entendiendo el cuerpo de forma muy similar a como lo entendieron los artistas griegos y romanos.

PROPORCIONES DISTORSIONADAS

Las vanguardias del siglo XX y el Expresionismo en particular buscaron alternativas al clasicismo de la forma humana. Pintores como Egon Schielle buscaron una expresión más personal en las figuras de proporciones distorsionadas, desagradables para el gusto de su época (hacia 1910). Hoy Schielle es un artista que goza de gran popularidad y sus figuras nos parecen clásicas.

Detalle de una decoración cerámica ática. Heracles rodeado de héroes. Los artistas de la antigua Grecia establecieron las pautas de representación de la figura humana. Tales pautas han sobrevivido hasta hoy con las múltiples apariencias marcadas por los distintos estilos artísticos.

El legado clásico implica la noción de que el cuerpo humano debe representarse según una idea de belleza. Y esa idea es formulable en normas objetivas de proporción y armonía. Es gracias a esas normas que todavía hoy perdura el modelo grecorromano.

Joan Raset, Desnudo de espaldas. Los artistas actuales siguen basando sus representaciones de la figura humana en planteamientos heredados de la tradición clásica. Tales planteamientos no excluyen las vías de expresión personal y la fantasía en el tratamiento del dibujo y el color.

Proporciones de la figura humana

Toda representación humana parte de una idea o concepto formal del cuerpo. Un cuerpo que no corresponde a ningún individuo en particular sino que ejemplifica la idea general de hombre o de mujer. La evolución de los estilos está marcada por distintas ideas y concepciones del cuerpo. Como es lógico, estas ideas pueden entenderse con mayor claridad en las representaciones de desnudos que en las de figuras vestidas. Durante mucho tiempo se ha creído que el deber del artista era representar figuras según una idea de belleza y que esa idea podía formularse mediante normas objetivas. De esa convicción partieron los cánones de proporciones que fijaban la altura y proporción de cuerpos hermosamente constituidos.

El canon de proporciones más natural es el de siete cabezas y media de altura para las figuras adultas y entre cuatro y seis cabezas para los niños y adolescentes. Éste es uno de los patrones más útiles para conseguir dibujos de figura bien proporcionados.

Las proporciones humanas varían a lo largo de las fases del crecimiento. Los órganos se desarrollan diferente y las proporciones se modifican pasando de las cuatro cabezas, en el niño de dos años, a las seis cabezas del preadolescente, hasta las definitivas siete cabezas y media en el joven adulto.

«Sin proporción ninguna figura puede ser perfecta, por mucha diligencia que se haya puesto en su realización.» Alberto Durero

La figura humana tiene su centro ideal a la altura del pubis y la mitad de la altura total equivale a la longitud de un brazo. Con el brazo caído, la altura del codo se encuentra justo por debajo de la cintura.

ALBERTO DURERO

Durante el Renacimiento la pasión por descubrir los “secretos” del arte y el pensamiento antiguos llevó a muchos artistas a idear distintos sistemas de proporciones que dieran la clave de la belleza en las artes. Alberto Durero dedicó grandes esfuerzos a buscar la razón geométrica de las proporciones humanas. Muchos otros tratadistas de la época propusieron ingeniosos modelos más o menos complejos, como el canon de diez cabezas que puede verse en la ilustración adjunta.

Relaciones entre las dimensiones del cuerpo

La armonía proporcional de una figura de siete cabezas afecta al conjunto de todas las dimensiones del cuerpo. Idealmente, la altura total de la figura puede encajarse con exactitud dentro de una circunferencia con centro en el pubis; y las dos mitades resultantes se inscriben en otras tantas circunferencias con centros en el esternón y a la altura de la rótula, respectivamente.

Durante siglos se ha creído que el deber de todo artista era representar figuras según una idea de belleza, la cual podía materializarse mediante normas objetivas.

Anatomía ósea

El esqueleto es una estructura articulada que sustenta el cuerpo humano y soporta y protege sus órganos internos. Casi todos los 233 huesos que forman este esqueleto se articulan y entran e...

Índice

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• Sumario
• El Dibujo: Materiales y medios
• El Dibujo: Fundamentos técnicos
• La Pintura: Materiales y medios pictóricos
• La Pintura: Fundamentos técnicos
• Procesos Pictóricos: Los temas artísticos