La Sanidad no se vende

Manual para la defensa de la Sanidad Pública

Hixinio Beiras Cal, Marciano Sánchez Bayle

• Editorial: Ediciones Akal
• Año: 2015
• ISBN:
  9788496797840
• Edición: 1
• Categoría: Ciencias sociales
• Categoría: Sociología

Saber y hacer; conocer y actuar; entender y explicar… teoría y práctica, son desde siempre las dos patas sobre las que caminaron quienes han cambiado el mundo y quienes desean seguir haciéndolo.La políticas en sanidad, además de complejas, están disfrazadas para dificultar la comprensión de lo que pasa. Grandes corporaciones publicitarias estudian la manera de presentarnos lo malo como bueno, lo falso como cierto, lo positivo como antiguo e ineficaz, en suma, lo que les interesa a ellos como bueno para todos. Y para quienes no son expertos más que en sus propias vidas y saberes profesionales, saber desenmascararlos será una gran ayuda.Tal es el objeto de este libro, con un texto útil, claro, ameno, de tono positivo, accesible para todo el mundo: una exposición de conceptos, propuestas, advertencias, falacias… que, a través del conocimiento, forme a auténticos activistas que luchen para transformar la realidad que se nos quiere imponer.No se trata de un simple libro-denuncia, no es periodismo de investigación, es algo mucho más sencillo y, al tiempo, necesario: una herramienta para personas con perfiles, conocimientos y experiencias muy variados, pero con el denominador común de sentirse obligadas a hacer algo para defender la sanidad pública. Un auténtico "manual de instrucciones del perfecto defensor de la Sanidad pública".

Capítulo XII

El efecto de la globalización en España

Manuel Martín García

Introducción

La globalización es el resultado de la convergencia de dos fenómenos:

• • El desarrollo y expansión de las tecnologías de la información y la comunicación, que han permitido la libre circulación de capitales, mercancías y personas.
• • El triunfo del capitalismo (disfrazado de economía de mercado) tras el hundimiento de la Unión Soviética y del grupo de países que pretendían desarrollar el socialismo en Europa a finales de los años ochenta del pasado siglo.

La desaparición del adversario socialista del capitalismo facilitó la mundialización de la economía, con lo que el mercado pasó a hegemonizar las relaciones sociales y, como consecuencia, todo puede ser trasformado en mercancía objeto de compraventa, incluyendo la salud y la atención a la misma.

Se pretende despojar al Estado de su obligación de garantizar servicios públicos esenciales como la educación, la sanidad, la cultura, etc., para facilitar la expansión de las grandes empresas multinacionales de servicios. La actual crisis financiera, cuya responsabilidad habría que buscar en la libre circulación de capitales y la ausencia de regulación de los mismos, está sirviendo de excusa para la expansión del mercado universal sin limitaciones.

La aplicación de la doctrina de la globalización en España va asociada al desmantelamiento y privatización de los servicios públicos que formaban el llamado Estado del bienestar, incluido el sistema sanitario público, que permitía amortiguar parcialmente las desigualdades sociales del sistema capitalista basado en la búsqueda de lucro y la competencia. Esta política está dejando sin protección a gran parte de la población, ampliando las desigualdades de salud, la marginalidad social, la inseguridad y la corrupción.

La eliminación de las fronteras ha favorecido la circulación de capitales, mercancías, personas y profesionales, con importantes consecuencias para la economía de los países. La globalización ha permitido la conquista del poder de decisión por las compañías multinacionales, que ahora controlan a los gobiernos y a los organismos que regulan las relaciones comerciales internacionales de los países, e incluso a otros organismos como la ONU, la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Banco Mundial (BM), el Fondo Monetario Internacional (FMI), la Organización Mundial del Comercio (OMC) y la Comisión Europea. Las multinacionales imponen gobiernos y controlan la UE para favorecer que adopte medidas coincidentes con sus intereses. Entre éstas estarían la supresión de controles al comercio de bienes y capitales, la mercantilización de las relaciones sociales, la supresión de tarifas aduaneras, la desregulación de las normas administrativas, fiscales o sociales, y la desaparición de los servicios públicos, como la educación o la sanidad, o las empresas públicas estatales.

La alianza de grupos financieros, aseguradoras sanitarias, empresas multinacionales de asistencia sociosanitaria, industria farmacéutica y de electromedicina y, sobre todo, las consultoras está condicionando el desarrollo acelerado de estas políticas, para lo que cuentan con el respaldo de los organismos internacionales como el Banco Mundial, que, en 1987, planteó en su informe sobre la financiación de los servicios sanitarios:

• • Trasladar a los usuarios los gastos por el uso de las prestaciones.
• • Ofrecer esquemas de aseguramiento para las principales causas de riesgo.
• • Utilizar de forma eficaz los recursos privados.
• • Descentralizar los servicios sanitarios públicos.

Seis años después, en 1993, el Informe sobre el Desarrollo en el Mundo del Banco Mundial propuso dos estrategias para disminuir la carga global de morbilidad en el mundo:

• • Introducir las fuerzas del mercado en el ámbito sanitario.
• • Mejorar la asignación de recursos públicos con criterios de eficiencia técnica e instrumental, por medio de intervenciones de alta efectividad y bajo coste.

Los miles de millones de euros que España destina a asistencia sanitaria (52.000 millones en 2014), hasta ahora en manos públicas, constituyen un poderoso atractivo económico para las multinacionales del sector sanitario. El gobierno del Partido Popular de Mariano Rajoy está aplicando diligentemente los acuerdos de la Organización Mundial del Comercio y la Unión Europea:

• • eliminando las barreras para la implantación del libre comercio en la sanidad;
• • abriendo el sistema sanitario a la libre competencia (unidades de gestión clínica para accionar los hospitales y centros de salud en empresas);
• • facilitando la circulación de capitales y empresas del sector sanitario, dando entrada a las multinacionales y fondos de inversión multinacional en los nuevos hospitales y servicios externalizados.

Esta estrategia está dirigida a eliminar el monopolio público de los sistemas sanitarios (alegando que esto supone una subvención que dificulta la libre competencia en el mercado de servicios sanitarios). En España, la Sanidad Pública supone entre el 30-40% del gasto sanitario de las comunidades autónomas, mientras que el sector servicios representa dos tercios de la economía y el empleo de la Unión Europea (UE), casi un cuarto de la totalidad de sus exportaciones y la mitad de todas las inversiones de la UE en otras partes del mundo. El gasto en protección social (educación, sanidad, pensiones, discapacidad…) supone el 27,3% del PIB en la zona. Este volumen de dinero representa una importante oportunidad de negocio para el sector privado, que explica por qué se pretende acabar con el sector público que obstaculiza el desarrollo de los servicios privados.

Determinantes de esta política

La Organización Mundial del Comercio (OMC) ha negociado con la Unión Europea el desmantelamiento y privatización de los ser­vicios públicos con objeto de permitir la implantación de las compañías de seguros sanitarios.

Esta política es la consecuencia del Acuerdo General sobre Comercio y Servicios (AGCS), que obliga a los gobiernos europeos a eliminar las regulaciones que limiten el comercio a nivel internacional, y a derogar los procedimientos y normas técnicas que impidan la implantación de hospitales y servicios sanitarios privados en los países europeos. En caso de desacuerdo, la OMC puede anular unilateralmente las normativas estatales de los diferentes países que la integran y sancionar a quienes no cumplan sus acuerdos y resoluciones. El AGCS establece, además, medidas para eliminar cualquier traba legal de los países para la implantación de empresas sanitarias y para abrir los sistemas sanitarios a la libre competencia y promover la libre circulación de capitales y empresas entre los países de la Unión. Se pretende así eliminar los sistemas sanitarios públicos, retirar las subvenciones a los mismos, reducir el gasto sanitario público y restringir la capacidad reguladora de gobiernos en sanidad y asistencia social.

La propia Organización Mundial de la Salud (OMS) está promocionando la desregulación y privatización de los sistema sanitarios.

La Oficina Regional Europea de la OMS ha dado por acabada la Estrategia Salud Para Todos en la zona, sin haber desarrollado una parte esencial de la misma como era acabar con las desigualdades, reorientar los sistemas sanitarios a la promoción de salud y poner la atención primaria en el eje de los mismos. Los objetivos de salud han pasado a un segundo plano, reemplazados por los de naturaleza económica y de mejora de la eficiencia orientados a reducir gasto público e introducir cambios en la financiación, la organización y la prestación de servicios: la Conferencia sobre R...

Índice

• Cubierta
• Portadilla
• Legal
• Autores
• Presentación
• Agradecimientos
• Prólogo
• I. Nuestra Sanidad Pública
• II. Cómo la salud pública ha cambiado nuestra vida
• III. Los ricos viven más y mejor que los pobres
• IV: Más asistencia sanitaria no siempre es más salud
• V. La atención sanitaria, de mercancía a derecho
• VI: ¿Cómo se paga la Sanidad Pública? Los diversos modelos
• VII. Breve historia de la Sanidad Pública en España
• VIII. ¿Quiénes son y por qué quieren quedársela?
• IX. ¿Y dónde está la pasta?
• X. No es un fenómeno nacional: la contrarreforma sanitaria en el mundo
• XI: El efecto de la globalización sobre la salud de las personas y sobre los servicios sanitarios
• XII. El efecto de la globalización en España
• XIII. Público y privado… por qué no es lo mismo
• XIV. Privatizando en silencio
• XV. Ellos
• XVI. Nosotros: ciudadanos y profesionales
• XVII: Sindicatos, partidos y la política sanitaria
• XVIII. Conocer y entender para contarlo y oponerse: la política de comunicación
• XIX. Amos y siervos. Mercados y gobiernos
• XX: Organización, organización
• XXI: Trabajando juntos
• XXII. La red a tu servicio
• XXIII. La hora de actuar: ¿por dónde empezamos?
• XXIV. Metidos en harina
• XXV. Lo que hemos aprendido en diversos sitios
• XXVI. Las tareas más urgentes
• XXVII. La salud y la ciudadanía europea
• Bibliografía recomendada
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