Capítulo 1
La moda y los textiles en las Naciones Unidas
1.- Los Objetivos del Milenio y los Objetivos de Desarrollo Sostenible o Agenda 2030
La Organización de las Naciones Unidas halogrado a principios de siglo un compromiso global con la “Declaración del Milenio” (Nelson y Presccott, 2003). La Declaración del Milenio firmada en el año 2000 por 189 jefes de estado representó la oportunidad para que todos los países sin distinción, asumieran un compromiso en el cumplimiento de ocho objetivos de desarrollo -denominados los “Objetivos del Milenio”- los cuales deberían ser alcanzados en el 2015. Según Flavio Fuertes (2005), la Declaración del Milenio implicó la posibilidad de un cambio de enfoque de las políticas públicas en el sentido de que el sistema económico debe estar subordinado a objetivos sociales más amplios y centrado en el desarrollo humano como eje fundamental. En 2012, en la cumbre de Río de Janeiro organizada por las Naciones Unidas y denominada “Río+20”, ya que allí se analizaron los avances de la cumbre realizada también en Rio de Janeiro pero en 1992, se anunció que los Objetivos del Milenio iban a ser reemplazados -a partir del 2015- por los “Objetivos de Desarrollo Sostenible” también llamados “la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible”.
Plantear la relación entre la moda y la sostenibilidad es complejo pero, a la vez, muy necesario como lo es intentar alguna explicación acerca de cómo hacerlo. Todos los movimientos a favor del desarrollo sostenible han ganado una batalla importante cuando en septiembre del 2015 los gobiernos, reunidos en la Organización de las Naciones Unidas, aprobaron una agenda que contiene 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible a alcanzar en 2030. La sostenibilidad ganó la pulseada en el seno de la ONU: los gobiernos reconocieron que tenemos recursos finitos, que el modelo actual de producción y consumo debe ser revisado y ajustado, y que los objetivos económicos de corto plazo deben encontrar un punto de equilibrio -siempre dinámico y difícil de encontrar- con el cuidado ambiental y la equidad social. Sin embargo los gobiernos plantearon también que estos objetivos deben ser compartidos entre todos los actores (públicos, privados, de la sociedad civil) y por todos los sectores de la economía. Proteger los recursos naturales, combatir la pobreza, reducir las desigualdades sociales, promover la integridad: son todos los temas que ingresan con la agenda de la sostenibilidad y amplían nuestra mirada sobre el rol del desarrollo sostenible y el papel que juega la política pública pero también la acción empresarial a través de lo que denominamos “sostenibilidad empresarial”.
Es una oportunidad para replantearnos las cosas como las venimos haciendo en los últimos 200 años, de la oportunidad de los consumidores de elegir un modo más consciente lo que consumimos, de la oportunidad de los emprendedores de romper con los paradigmas tradicionales de costo-beneficio, de la oportunidad que tienen los negocios de crear valor para todos.
La agenda está compuesta por 17 Objetivos que se muestran a continuación, los cuales incluyen 169 metas:
- Objetivo 1: Poner fin a la POBREZA, en todas sus formas y en todo el mundo.
- Objetivo 2: HAMBRE Cero. Poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y promover la agricultura sostenible.
- Objetivo 3: Buena SALUD. Garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades.
- Objetivo 4: EDUCACIÓN de calidad. Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos.
- Objetivo 5: IGUALDAD de género. Lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y niñas.
- Objetivo 6: AGUA limpia y saneamiento. Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos.
- Objetivo 7: ENERGÍA asequible y sostenible. Garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna para todos.
- Objetivo 8: TRABAJO decente y crecimiento económico. Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos.
- Objetivo 9: INDUSTRIA, innovación, infraestructura. Construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización inclusiva y sostenible y fomentar la innovación.
- Objetivo 10: Reducir INEQUIDADES. Reducir la desigualdad en y entre los países.
- Objetivo 11: CIUDADES Y COMUNIDADES SOSTENIBLES. Conseguir que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles.
- Objetivo 12: CONSUMO responsable y producción. Garantizando modalidades de consumo y producción sostenibles.
- Objetivo 13: Acción CLIMÁTICA. Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
- Objetivo 14: Vida MARINA. Conservar y utilizar en forma sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible.
- Objetivo 15: Vida en la TIERRA. Proteger, restablecer y promover el uso sostenible de los ecosistemas terrestres, efectuar una ordenación sostenible de los bosques, luchar contra la desertificación, detener y revertir la degradación de las tierras y poner freno a la pérdida de diversidad biológica.
- Objetivo 16: Paz, JUSTICIA e instituciones fuertes. Promover sociedades pacíficas e inclusivas para el desarrollo sostenible, facilitar el acceso a la justicia para todos y crear instituciones eficaces, responsables e inclusivas a todos los niveles.
- Objetivo 17: ALIANZAS para los objetivos. Fortalecer los medios de ejecución y revitalizar la alianza global para el desarrollo sostenible
2.- El Pacto Global
Derivado de la “Declaración del Milenio”, el Pacto Global es una iniciativa conjunta del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), la Organización Internacional del Trabajo (OIT), dirigida a favorecer el desarrollo de la responsabilidad social empresaria, promoviendo los derechos humanos, los estándares laborales, la preservación del medioambiente y la anticorrupción.
El Pacto Global es una iniciativa que promueve, a través del compromiso voluntario de las empresas, una nueva cultura corporativa en la manera de gestionar los negocios. Y su verdadera naturaleza es la de crear una red de trabajo en constante crecimiento que pueda apoyar a las empresas a través del aprendizaje, del conocimiento de las experiencias a ejercer un liderazgo como ciudadano corporativo y, de ese modo, puedan influir sobre otros a través de sus comportamientos (Fuertes y Goyburu, 2004). En pocas palabras, el Pacto Global es la contribución del sector privado a los Objetivos del Milenio (Gardetti, 2005) y, por consiguiente, a los Objetivos de Desarrollo Sostenible o Agenda 2030. El Pacto tiene como finalidad facilitar la alineación de las políticas y prácticas corporativas a valores y objetivos éticos universalmente consensuados e internacionalmente aplicables ya que está basado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, la Declaración de la Organización Internacional del Trabajo sobre Principios Fundamentales y Derechos Laborales y la Declaración de Río de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo. A continuación se muestran los principios del Pacto Global área por área (Fuertes, Iametti y Goyburu, 2004):
Derechos Humanos
- Apoyar y respetar la protección de los derechos humanos.
- No ser cómplice de abusos de los derechos.
Condiciones Laborales
- Apoyar los principios de la libertad de asociación sindical y el derecho a la negociación colectiva.
- Eliminar el trabajo forzoso y obligatorio.
- Abolir cualquier forma de trabajo infantil.
- Eliminar la discriminación en materia de empleo y ocupación.
Medio Ambiente
- Apoyar el enfoque preventivo frente a los retos medioambientales.
- Promover mayor responsabilidad medioambiental.
- Alentar el desarrollo y la difusión de tecnologías respetuosas del medioambiente
Anticorrupción
- Los negocios deberán actuar en contra de la corrupción en todas sus formas, incluyendo la extorsión y el soborno
El Pacto Global posee una iniciativa referida a la industria textil y de la moda desarrollada –entre 2009 y 2011- por la Nordic Fashion Association y la Nordic Initiative Clean and Ethical (NICE) y presentada en la Cumbre de las Naciones Unidas en Río de Jainero en 2012 (Río+20). La misma se denomina “Código de Conducta y Manual para la industria textil y de la moda”. En palabras de Gearg Kell -Director Ejecutivo del Pacto Mundial en aquél tiempo-: “La industria textil y de la moda, que enfrenta desafíos sociales y ambientales serios y muy divulgados, se encuentra en una posición única para el lanzamiento de una iniciativa sectorial bajo la égida del Pacto Global de las Naciones Unidas. Estamos muy entusiasmados con este esfuerzo y esperamos con ansias la colaboración con NICE y sus socios”.
A pesar de esta iniciativa creo conveniente hacer una referencia a las áreas que abarca el Pacto Global en referencia a los textiles y la moda, aplicándose estas a todas las empresas independientemente de su tamaño:
“Creemos valioso -desde una mirada retrospectiva- que solo en dos generaciones se haya alcanzado con amplia mayoría social la nueva construcción constitucional que agregó la inclusión de los derechos humanos en toda su amplitud”.
Parte de las Conclusiones
Derechos Humanos. Antes y Después de 1994
Alicia Pierini
En el área de los Derechos Humanos
La responsabilidad de las empresas de respetar los derechos humanos se aplica –más allá de su tamaño- a su contexto operacional, propietario/emprendedor y estructura.
Las marcas, emprendimientos y pequeñas empresas pueden disponer de procedimientos y estructuras de gestión más informales que las grandes empresas, de modo que sus respectivos procesos y políticas adoptarán formas diferentes. De todos modos, la responsabilidad de respetar los derechos humanos se aplica plenamente y por igual a todas las empresas.
En el área de las Condiciones Laborales
Cada vez son más las empresas, marcas y emprendimientos que están tomando conciencia acerca de los beneficios de respetar y promover los derechos laborales. Existen razones de peso por las que las empresas deberían incluir los derechos laborales en sus políticas y prácticas. No se trata solo de cumplir con las legislaciones nacionales y con los estándares globales esenciales, sino de adoptar un enfoque estratégico que permita tanto vislumbrar nuevas oportunidades, como gestionar riesgos. Todo ello incluye los límites locales en horas de trabajo y de su no excedencia, respetar su cuidado en tiempos de enfermedad, su período de vacaciones, que puedan mantener un diálogo en el cuál puedan expresar su preocupaciones, incluso sus quejas, y que su lugar de trabajo debe ser seguro e higiénico.
En Medio Ambiente
La responsabilidad ambiental de las marcas/emprendedores/empresas comienza con el impacto de sus operaciones y se extiende a lo largo de la cadena de valor, desde el diseño y materiales hasta la fabricación y el envío del producto para el uso del consumidor
Asumir un compromiso ambiental es percibido, cada vez más por parte de las empresas, como un marco estratégico para la gestión de riesgos y para la creación de valor tanto para el negocio como para la sociedad en general.
En Anticorrupción
Las empresas –reitero, cualquiera sea su tamaño, desde emprendimientos hasta marcas establecidas- deben evitar in...