Deja entrar la luz
eBook - ePub

Deja entrar la luz

De la adicción a la conciencia

  1. 83 páginas
  2. Spanish
  3. ePUB (apto para móviles)
  4. Disponible en iOS y Android
eBook - ePub

Deja entrar la luz

De la adicción a la conciencia

Detalles del libro
Vista previa del libro
Índice
Citas

Información del libro

Deja entrar la luz es una historia estremecedora de la realidad actual: el narcotráfico, el micro tráfico y sus últimas consecuencias, la adicción y el pequeño porcentaje de aquellos que la superan. Sólo tres de diez personas lo logran, dicen las estadísticas.En este libro la autora, Loreto Varela, ofrece una experiencia llena de esperanza y muestra un camino para encontrar la luz. Desde su mirada como psicóloga, muestra a través de sus personajes el sufrimiento, la pérdida y la soledad de una enfermedad silenciosa que afecta a tantas personas en el mundo de hoy.Este libro es una experiencia de realidad en sí mismo. Amelia, la protagonista, cuenta su historia para demostrar que es posible salir de la oscuridad y volver a empezar.

Preguntas frecuentes

Simplemente, dirígete a la sección ajustes de la cuenta y haz clic en «Cancelar suscripción». Así de sencillo. Después de cancelar tu suscripción, esta permanecerá activa el tiempo restante que hayas pagado. Obtén más información aquí.
Por el momento, todos nuestros libros ePub adaptables a dispositivos móviles se pueden descargar a través de la aplicación. La mayor parte de nuestros PDF también se puede descargar y ya estamos trabajando para que el resto también sea descargable. Obtén más información aquí.
Ambos planes te permiten acceder por completo a la biblioteca y a todas las funciones de Perlego. Las únicas diferencias son el precio y el período de suscripción: con el plan anual ahorrarás en torno a un 30 % en comparación con 12 meses de un plan mensual.
Somos un servicio de suscripción de libros de texto en línea que te permite acceder a toda una biblioteca en línea por menos de lo que cuesta un libro al mes. Con más de un millón de libros sobre más de 1000 categorías, ¡tenemos todo lo que necesitas! Obtén más información aquí.
Busca el símbolo de lectura en voz alta en tu próximo libro para ver si puedes escucharlo. La herramienta de lectura en voz alta lee el texto en voz alta por ti, resaltando el texto a medida que se lee. Puedes pausarla, acelerarla y ralentizarla. Obtén más información aquí.
Sí, puedes acceder a Deja entrar la luz de Loreto Varela en formato PDF o ePUB, así como a otros libros populares de Sciences sociales y Biographies de sciences sociales. Tenemos más de un millón de libros disponibles en nuestro catálogo para que explores.

Información

Año
2021
ISBN
9786079914905
IV. EL DETONANTE:
UN NOVIAZGO PERFECTO




No te quedes inmóvil
al borde del camino
no congeles el júbilo
no quieras con desgana
no te salves ahora
ni nunca
no te salves
no te llenes de calma
no reserves del mundo
sólo un rincón tranquilo
no dejes caer los párpados
pesados como juicios
no te quedes sin labios
no te duermas sin sueño
no te pienses sin sangre
no te juzgues sin tiempo
pero si
pese a todo no puedes evitarlo
y congelas el júbilo
y quieres con desgana
y te salvas ahora
y te llenas de calma
y reservas del mundo
sólo un rincón tranquilo
y dejas caer los párpados
pesados como juicios
y te secas sin labios
y te duermes sin sueño
y te piensas sin sangre
y te juzgas sin tiempo
y te quedas inmóvil
al borde del camino
y te salvas
entonces
no te quedes conmigo

«No te salves», Mario Benedetti


La razón por la que me estrellé de bruces con mi adicción a la droga fue una decepción amorosa. Se me partió el corazón tras concluir un largo e intenso noviazgo de seis años con José Antonio, el hombre perfecto con el que pensé que pasaría el resto de mi vida, con quien me casaría de blanco. No fue así.
Nosotros nos conocimos porque un día perdí unos hermosos aros de mi madre y tuve que ir a comprarlos para que ella no se enterara y no fuera a regañarme, así que le pedí a una de mis amigas que me acompañara a buscarlos en algún centro comercial. «Vente a la casa, estoy con mi novio y con un amigo que te queremos presentar», me dijo alegre mi amiga y al llegar, el flechazo con José Antonio fue inmediato: fue él quien me llevó en su auto a buscar por todos los centros comerciales esos ansiados aros hasta que los encontramos.
Una semana después me invitó a su fiesta. Para empezar, fue a mi casa a buscarme en su auto el día de su propio cumpleaños y para mí ese detalle fue el principio de muchos, pues él siempre me hizo sentir muy especial, se desvivía en atenciones y yo entré en un mundo fantástico de mucho amor y protección como el que siempre tuve en casa. En verdad tuvimos una relación llena de todo ese romanticismo de las películas que a mí me gustaba tanto.
A partir de entonces nos hicimos inseparables. En todos sentidos: yo pasaba más tiempo en casa de José Antonio y su generosa familia que con mis propios padres y hermanos.
Al principio de la relación, me recuerdo en mi estilo coqueto y con un poco de miedo frente a este hombre tan decidido a conquistarme, pero yo estaba indecisa a comprometerme. Nuestros abuelos tenían casa en Reñaca, así que fuimos cada uno con sus respectivas familias y pasó a buscarme para ir a caminar a la playa. En ese momento pensaba que sólo tenía 17 años y que estaba un poco impactada con este ser tan romántico, tan lleno de sorpresas, que llegó como un huracán y lo estremeció todo. En una caminata nocturna por la playa me miró fijamente y me entregó un sobre. Cuando lo abrí, el papel decía «No te salves». Este poema de Mario Benedetti me acompañó durante muchas ocasiones en mi vida, aunque en ese entonces no sé si lo entendí en su profundidad, pero al menos sentí que fue una invitación a cruzar una puerta, abrir el corazón, atreverme amar y claro que así lo hice.
Él era muy encantador, muy protector, viajamos juntos, nos fuimos a Nueva York con toda su familia, y esta relación se hizo muy dependiente. Yo no hacía nada más que estar con él.
Hubo una situación en la casa de mi novio que estuvo ligada con la adicción, sólo que entonces no le tomé el peso: en esa familia se automedicaban para cualquier malestar, tomaban remedio para todo, como le decimos en Chile, desde un simple dolor de estómago hasta situaciones más complejas, como el control de la ansiedad por medio de psicotrópicos.
En ese viaje en que todos fuimos a Nueva York, la hermana de José Antonio me ofreció una pastilla para dormir bien durante el largo trayecto. «Es un viaje muy largo, descansarás, no pasa nada, todo está bien», me dijo. Y en efecto, no desperté en todas las horas de vuelo. Fue la primera vez en mi vida que tuve contacto con alguna sustancia que calmaba todo, hasta las emociones, y relajaba por completo el cuerpo. Para ellos, incluso para mi novio, era tan normal como tomar un dulce, sin descartar los medicamentos controlados, pues mi entonces suegra tenía amistad con psiquiatras que les prescribían las recetas. Y los tomaban sin pudor, todo el tiempo, lo tenían completamente normalizado en sus vidas.
Entré en esta dinámica sólo un par de veces durante mi noviazgo, porque en realidad vivía en un estado de felicidad con mi José Antonio y no lo necesitaba y porque en mi propia familia no se acostumbraba. Incluso mi madre, cuando se dio cuenta de que había tomado esas pastillas, me regañó enérgicamente y me dijo que n...

Índice

  1. Portada
  2. Epígrafe
  3. Tan lejos, tan cerca
  4. Un acto de amor
  5. Prefacio: Kintsugi
  6. I. Adiós
  7. II. El principio del fin
  8. III. Una familia feliz
  9. IV. El detonante: un noviazgo perfecto
  10. V. Donde menos la imaginas
  11. VI. En adicción
  12. VII. El encuentro con el centro de rehabilitación
  13. VIII. Mis espejos
  14. IX. Ángel y maestra
  15. X. La mejor compañía
  16. XI. El encuentro con Dios
  17. XII. Vulnerable, siempre
  18. XIII. Esperanza
  19. XIV. El final feliz lo escribes tú