Otras memorias I

Testimonios para la transformación de la realidad

Omar Basabe, Laura Benadiba

• Editorial: Editorial Maipue
• Año: 2017
• ISBN:
  9789873615832
• Categoría: Historia
• Categoría: Historia social

Al realizar una entrevista de Historia Oral, se realza el valor de las voces de los testimonios, fortaleciendo y reconociendo su identidad. Estos testimonios se convierten en una denuncia social que interviene en el presente, superando la tradicional endogamia académica y su poca incidencia social. Este tipo de metodología, además de aportar un significado cognitivo aporta otro, el afectivo, indispensable, para la construcción del conocimiento histórico en todos los niveles de la educación.

1. Relato documental en primera persona como sustento de la reconstrucción de la historia de la Argentina reciente

Omar Basabe8

St. Thomas University

New Brunswick, Canadá

La última dictadura autodenominada Proceso de Reorganización Nacional (1976-1983) con sus consecuencias políticas, económicas, sociales y culturales devastadoras, presenta un desafío en el momento de su lectura desde los más variados territorios discursivos: el ensayo, la ficción, el informe periodístico, los rituales colectivos, la apropiación de los lugares de exterminio para la creación de los lugares de la memoria, monumentos, creación pictórica, cine, etc. ¿A partir de qué base de sustento se debería proceder a construir la representación de la dictadura?

Ya antes del fin del terrorismo de Estado se evidenciaban dos posicionamientos diferentes y hasta antagónicos al respecto. Por un lado la historia oficial puesta en circulación por el alfonsinismo tomaba discursos avanzados por los jerarcas de la dictadura (teoría de la provocación, asimilación de insurgencia revolucionaria con terrorismo, ocultamientos de eventos del pasado que condicionaron la lucha revolucionaria de los años setenta, inducciones discursivas, etc.) empaquetados en lo que se llamó la teoría de los dos demonios: dos bandos desquiciados que llevaron al abismo a la sociedad argentina, mera espectadora de esa lucha demencial comenzada en el vacío, sin antecedentes históricos que la precedieron. Esta representación fue la que predominó durante los ochenta y parte de los noventa, con algunas voces que colisionaban con esas hegemonías discursivas.

A partir de los noventa comienza a perfilarse con más fuerza otro campo discursivo que le disputa la hegemonía a los constructos afines al alfonsinismo. En este espacio se sitúan los relatos que desmienten las pretensiones discursivas de la historia oficial y tratan de recuperar la militancia revolucionaria, sus valores (negados por la versión alfonsinista) y las identidades de los militantes de diferentes territorios ideológicos pero con un proyecto común y colectivo: la construcción de una sociedad más justa por vías de la liberación nacional y el socialismo. Este espacio discursivo discordante cobra fuerza principalmente a partir de la década de 1990, cuando los sobrevivientes comienzan dar el testimonio de su praxis militante, a ejercer el derecho de la palabra, la cual había estado silenciada bajo virtual amenaza de arresto por la legislación alfonsinista9.

La modernidad despreció la oralidad y fetichizó el documento escrito en la reconstrucción de la historia, pero en las prácticas discursivas anti-hegemónicas que comienzan a conocerse a partir de los noventa, la Historia Oral cobra importancia y se constituye en sustento de la reconstrucción de la Otra Historia. Aunque Lynda Hutcheon sostiene que todo documento histórico parte de un testimonio oral, en Argentina el basamento oral ha sido puesto en duda por los diseminadores de la historia oficial por considerarlo contaminado con una fuerte dosis subjetiva que pervierte la lectura del pasado de la Argentina reciente e impide echarle una mirada crítica para que “vuelva como problema”. Por lo tanto, argumentan, el testimonio en primera persona no puede ser considerado documento válido al momento de escribir “la buena historia”, al contrario, debe ser tomado como objeto de duda.

La diferencia en los posicionamientos plantea lo que se dio en llamarse la “lucha por la significación”, con fuerte contenido ideológico. Los constructos de los diseminadores de la historia oficial exhiben tres pilares: fetichización del Nunca más y el Juicio a las Juntas y la teoría de los dos demonios, sustento que se articula con estrategias discursivas tales como inversiones semánticas y desarticulación de la sucesión de los eventos históricos que llevaron a las luchas de los años setenta, de suerte que estos se leen como una serie de eventos encapuchados –valga la metáfora– sin conexión causal. Desde el prisma de esta visión de la historia, la última dictadura fue un fenómeno completamente nuevo sin conexión con el pasado y el rechazo al valor de la voz del testigo ocular les facilita ese sustrato fundacional en su particular representación de la historia de la Argentina reciente.

Por su parte, la gran batalla cultural librada por la Otra Historia ha sido refutar categóricamente la teoría de los dos demonios, la cual aparece una y otra vez bajo diferentes formas resemantizadas. Al mismo tiempo, poner en duda los fetiches de la historia oficial, tales como el valor fundacional del Juicio10 y considerar el Nunca más no como prueba acabada de una legislación que favoreció los derechos humanos11, sino como una prueba de la barbarie y los crímenes de la dictadura.

El recurso principal de la Otra Historia ha sido, como ya mencioné anteriormente, el relato oral que da cuenta de la historia personal y colectiva de la militancia setentista, sus vivencias, su proyecto de país, sus posicionamientos y tensiones. Ahora bien, cuál es el valor documental de la Historia Oral, qué impacto tienen las subjetividades que la misma expresa en la reconstrucción de la historia de la Argentina reciente, cuáles son los datos que la oralidad puede entregar para lograr la inteligibilidad de lo ocurrido y cuáles son los caminos de expresión de la historia oral que reconstruye la militancia revolucionaria de los setenta.

Laura Benadiba define la Historia Oral como:

“…un procedimiento establecido para la construcción de nuevas fuentes para la investigación histórica, con base en testimonios orales recogidos sistemáticamente bajo métodos, problemas y puntos de partida teóricos explícitos. Su análisis supone la existencia de un cuerpo teórico que se organiza a partir de la instrumentación de una metodología y un conjunto de técnicas específicas, entre las que ocupa un lugar fundamental la entrevista grabada”. 12

La historia oral no es la suma caótica de datos, anécdotas, imprecisiones, proyecciones subjetivas, olvidos, datos importantes o irrelevantes (si los hay). Al contrario, desde la perspectiva explicitada en la definición de Benadiba el testimonio en primera persona emerge ya como documento recuperado a través de técnicas y estrategias específicas sustentadas por un corpus teórico que le confiere el ordenamiento sistemático relevante para ser considerado fuente del archivo histórico. En el campo de la historia oral, el historiador va a buscar lo escondido, aquello que ha sido descuidado por la “historia tradicional” por considerarlo irrelevante, va al encuentro de “grupos marginales, opositores a los sectores que poseen el poder, minorías culturales, de ‘gente común’, etc”13 y hace escuchar sus voces, les reconoce el derecho a la palabra en el proceso de reconstrucción histórica.

El testimonio brindado al investigador de la historia oral, en el campo que nos ocupa, es anti-hegemónico y subversivo porque se opone a la versión oficial de la historia y pone en relieve aquello que se quiere ocultar, tanto por intereses ideológicos como mercantilistas. En el caso de la reconstrucción histórica de los eventos que marcaron la segunda mitad del siglo XX en Argentina, el testimonio desafía el poder de las hegemonías discursivas y subvierte la representación de los eventos sustentada en estrategias de manipulación, silenciamientos, distorsión y resemantización de lexemas y de lugares físicos donde se cometieron los crímenes de la última dictadura cívico-militar y eclesiástica. La historia ya no se presenta según un legitimado discurso único formador de héroes sobrehumanos y beatificados o demonios execrables, sino como un entramado de discursos con puntos de encuentros y desencuentros donde se halla el dato buscado, la identidad perdida, el “chiquitaje”14 cargado de significación, la línea de investigación para acercarse a la verdad. Cada testimonio, cada voz que toma la palabra, entrega una narrativa inconclusa que se completará con el encuentro del testimonio de otras voces, de otras vivencias. Por otra parte, la pragmática de estos relatos los expande a las nuevas generaciones que no vivieron la dictadura y establece un puente de unión intergeneracional, conformándose una memoria colectiva viva y polifónica. Así, el aparente solipsismo narcisista del testimo...

Índice

• Otras memorias I
• Testimonios para la transformación de la realidad
• Introducción
• Prólogo
• 1. Relato documental en primera persona como sustento de la reconstrucción de la historia de la Argentina reciente
• Bibliografía
• 2. Memorias sobre la represión del franquismo: Esperanza
• Bibliografía
• 3. Una historia “olvidada” de Malvinas
• Bibliografía
• 4. El estilo de Jaime Guzmán. Una memoria para la UDI. Chile, 1991
• Bibliografía
• 5. La memoria de la ausencia
• Bibliografía
• 6. Osvaldo Suárez, un deportista peronista
• Bibliografía
• 7. El relato vivo detrás de la literatura
• Bibliografía
• 8. La huelga de 1959 y la privatización del ferrocarril.
• Bibliografía
• 9. Historia Oral, memoria y archivos escolares: una experiencia en la construcción de un archivo de fuentes orales en el Colegio Nacional de Mar del Plata
• Bibliografía
• 10. Las bagualeras. Contrapunto entre la historia escrita y la historia oral
• Bibliografía
• 11. Las migraciones como problema vistas desde el diario de viajes de un emigrante catalán a la Argentina (Luján, 1852-1906). Miradas desde una fuente alternativa
• Bibliografía
• 12. La representación de la memoria en la historieta Maus de Art Spiegelman: de la entrevista a la viñeta
• Bibliografía
• 13. Las últimas palabras del capellán
• Bibliografía
• 14. Que Dios y la Patria se lo demanden… Política Nacional y escala local, las luchas y divisiones del peronismo en Pergamino, 1973-1976
• Bibliografía