Motívate

Sánchez-Migallón, Antonio

• Editorial: LID Editorial
• Año: 2015
• ISBN:
  9788483562338
• Categoría: Persönliche Entwicklung
• Categoría: Persönlicher Erfolg

Motívate recoge la esencia de la experiencia acumulada por el autor durante más de tres décadas como coach. Hace 15 años, Antonio Sánchez-Migallón diseñó una conferencia muy especial partiendo de la necesidad de la motivación en el trabajo. La conferencia fue tomando cuerpo y ha sido revisada a lo largo del tiempo hasta su versión actual, dando lugar a esta guía en la que se muestra el camino a seguir para aprender a gestionar el talento, las emociones y los conocimientos de uno mismo para automotivarse.La lectura de Motívate genera vitalidad, aprendizaje, reflexión, dosis de alegría y, sobre todo, energía personal para uno mismo y para mejorar el desemeño en el entorno laboral.

«Sólo es posible avanzar cuando se mira lejos.

Sólo cabe progresar cuando se piensa en grande».

José Ortega y Gasset

¿En qué condiciones realizamos el trabajo?

¿Qué nos está pasando?

¿Qué sucede en nuestras vidas para estar siempre aletargados y con un gran poso de tristeza?

Cómo ya os he comentado, qué sucede todos los días cuando llegamos a nuestro puesto de trabajo y alguien un poco más animado dice:

–¡Buenos días!

Y se oye…

–Serán para ti.

¿Qué nos pasa cuando nos levantamos?

Si instaláramos una grabadora, una cámara que nos enfocara cuando suena el despertador. ¿Oiríamos barbaridades?

Y esto no es lo peor. Nada más abrir los ojos muchos de nosotros empezamos el día con pensamientos como estos: «otra vez», «ya vamos», «y todavía es martes».

¿Y qué sucede ante el espejo?

Ante el espejo pensamos:

–¿Cómo puedo estar tan gordo?

–Y las ojeras que tengo.

–¡Vaya pelos!

En 10 minutos hemos tenido tal cantidad de pensamientos negativos que...

Los que tenemos hijos –yo tengo dos– volcamos en ellos todos estos síntomas de desánimo:

–¡Vamos, desayuna! ¿Te has lavado los dientes? ¡Busca a tu hermano, llegamos tarde!

Por fin salimos, nos montamos en el coche, llegamos al colegio y oímos:

–¿Puedo hablar un momento contigo?

Y pensamos: «¡joder, la profesora del niño!, ¿qué habrá hecho este?».

Te vuelves y dices:

–¿Qué tal? Buenos días, ¿qué sucede?

–Nada, sólo quería darte la enhorabuena. Tu hijo va fenomenal.

Apenas son las nueve de la mañana y ya nos parece la una de la tarde.

En segundos hemos tenido infinidad de pensamientos negativos que…

Pero así no transcurren sólo los días y al que es alegre lo transformamos en triste. ¡Lo importante es estar tristes! ¡Hay que estar tristes! ¡No podemos estar alegres!

Así estamos por las mañanas.

Si pusiéramos una cámara y un encuestador en la puerta de una administración de lotería, ocurriría esto:

–¿Qué tal? ¿Comprando lotería?

–Sí. Total, para nada. No me va a tocar.

No queráis saber lo que opino sobre un individuo que compra cualquier mercancía para nada.

Para aquellos que compran lotería con la esperanza de que les toque, les digo que hay que comprar la lotería de los sábados los lunes y la lotería de Navidad en enero para tener esperanza todo el tiempo posible. Pero la mayoría de nosotros la compramos un día antes y disfrutamos muy poco de la ilusión y de los sueños que podríamos hacer realidad si nos tocara.

¿Quizás lo que importa es que no toque?

¿Y si nos toca?

¿Qué ocurriría?

En los pulsos que echamos al reloj dormimos poco y mal, comemos muy rápido y entonces tomamos antiácidos, paracetamol, ibuprofeno, ansiolíticos. Los bolsos y los bolsillos están llenos de medicamentos por si nos ocurren cosas y, cuando llegamos a casa, aun hoy teniendo la suerte de tener un trabajo, estamos agotados, agotados de nosotros mismos.

Nos cansamos de nuestro trabajo, nos dormimos pensando en él y aproximadamente a partir de los treinta y tantos aparecen el estrés, la ansiedad, el infarto cerebral, el infarto de miocardio…

¡El 70% de nuestra vida jodidos!

Hoy en día hablamos de «crisis» como si fuera otro de los productos que acuña la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre. Y esta palabra de reciente circulación tiene cierta gracia para dos generaciones que llegaron a comer, hace unos años, mondas de patata.

Las cosas cambian, la vida también, y las crisis llegan, se ins­talan, se marchan, regresan, será mejor, peor o diferente y lo que habrá que hacer será adaptarse y disfrutar del momento que vivimos porque, salvo que exista la reencarnación, sólo tenemos una vida para disfrutar con intensidad.

En mi infancia, cuando salía con mis amigos, si me retrasaba para llegar a tiempo a casa, tenía que llamar a mis padres desde teléfonos públicos a los que había que echar monedas y si no tenías monedas te ibas a casa corriendo.

En mi infancia, en lugar de mensajes de texto instantáneos, enviábamos largas cartas a través del servicio público de correos y aguardábamos la respuesta.

Con estos ejemplos quiero destacar que la mutación es tan veloz que casi nada es lo mismo, que todo se transforma a cada pequeña fracción de segundo y que para todos es imprescindible adaptarse al mismo ritmo.

¿Os acordáis del Cola Cao? Me encanta. Era un producto único. Se vendía por sí mismo. Llegaron competidores y realizó importantes transformaciones para adaptarse al nuevo mercado.

Las cosas están cambiando tanto que dejamos pasar grandes oportunidades que no sabemos aprovechar.

Hay expertos que empezaron a destacar la importancia de los cambios hace mucho tiempo. Entre ellos un auténtico gurú del cambio: Peter Drucker (1909-2005), abogado y tratadista vienés, revolucionó la administración en el siglo pasado y nos dejó obras valiosísimas (cuya lectura recomiendo) sobre la gestión de las organizaciones. Hoy es considerado el padre del management y se estudia en las escuelas de negocios. Drucker destacó en sus escritos: «lo importante no será el producto o servicio que se comercialice en las empresas, lo importante serán las personas que comercialicen los productos y los servicios».

Si el servicio o el producto se pueden copiar lo que recomendamos es que nos transformemos y personalicemos todo lo que hagamos.

Coca-Cola lo hizo hace muchos años con el mejor anuncio publicitario de la historia de la publicidad: «la chispa de la vida». En la actualidad en sus campañas publicitarias lo relevante son las personas y la actitud que tienen, no el producto. Importa quienes toman el refresco y su marketing es pura energía vital.

Si no cambiamos tendremos dificultades.

Dejar bajo la responsabilidad de los jefes el «asunto» del producto con tal que nos paguen, me pregunto: ¿realmente hay que pasar 40 años trabajando sólo para que nos paguen?

En los próximos 20 años las empresas que tengan en plantilla personas creativas capaces de convencer, felices, optimistas, detallistas con su aspecto, serán las empresas que seguirán el ritmo de los cambios.

¿Cómo podemos conseguir este tipo de personas? Convirtiéndonos cada uno en pieza clave para que nuestras empresas sean competitivas.

Os decía al inicio que estos aspectos los podríamos integrar y extenderlos desde lo personal hacia lo profesional y viceversa. Bueno, pues olvidad a vuestras empresas, ¡hacedlo por y para vosotros mismos!

Las personas que disfruten de lo que hacen, de cómo lo hacen, que lo sientan y tengan pasión por construir, que tengan sensaciones de felicidad como las que se tienen los sábados y los domingos y lo apliquen en el trabajo, se convertirán en personas diferentes y si las empresas de las que forman parte se benefician, tanto mejor.

Por cierto os diré que las personas no se transforman en diferentes porque otros creamos que pueden hacerlo. Las personas son diferentes únicamente por sí mismas.

Por ello, si vamos a hablar de motivación, tenemos que partir de que no hay factores externos que ocasionen esta sensación de bienestar y capacidad. La causa principal ...

Índice

• MOTÍVATE
• CONTRAPORTADA
• PORTADA
• PORTADA INTERIOR
• PRÓPOSITO
• ÍNDICE
• PRÓLOGO
• AGRADECIMIENTOS
• COMENCEMOS
• OS PONGO EN SITUACIÓN
• TOMAR CONCIENCIA
• EL TALENTO Y SU VALOR PARA GENERAR MOTIVACIÓN
• A GATAS, DESPACIO, COMO UN NIÑO
• UN ADELANTO HACIA LA MOTIVACIÓN
• TIENES QUE SEGUIR APRENDIÉNDOTE
• EN BUSCA DE NUESTRA PROPIA AUTONOMÍA
• SÉ FLEXIBLE Y ADÁPTATE
• TIENES QUE RECONOCERTE ANTES DE SER RECONOCIDO
• GENERA BUEN AMBIENTE
• NO HAY EXCUSAS, MOTÍVATE
• ANTONIO SÁNCHEZ-MIGALLÓN
• CRÉDITOS