Jardín novelesco
eBook - ePub

Jardín novelesco

  1. 55 páginas
  2. Spanish
  3. ePUB (apto para móviles)
  4. Disponible en iOS y Android
eBook - ePub
Detalles del libro
Vista previa del libro
Índice
Citas

Información del libro

Jardín Novelesco es una colección de cuentos de Ramón María del Valle-Inclán publicada en 1905 e inspiradas, en palabras del autor, por los cuentos de miedo que le contaba la sirvienta de su abuela. En ella, el autor hace una aproximación a las historias de misterio, de toque siniestro, del lado más supersticioso de su Galicia natal en una compilación de lo que él llama Historias de santos, de almas en pena, de duendes y ladrones. En estos cuentos se mezcla la fina ironía de la pluma del autor con una suerte de costumbrismo rural muy cercano al lúgubre sobrenatural becqueriano.-

Preguntas frecuentes

Simplemente, dirígete a la sección ajustes de la cuenta y haz clic en «Cancelar suscripción». Así de sencillo. Después de cancelar tu suscripción, esta permanecerá activa el tiempo restante que hayas pagado. Obtén más información aquí.
Por el momento, todos nuestros libros ePub adaptables a dispositivos móviles se pueden descargar a través de la aplicación. La mayor parte de nuestros PDF también se puede descargar y ya estamos trabajando para que el resto también sea descargable. Obtén más información aquí.
Ambos planes te permiten acceder por completo a la biblioteca y a todas las funciones de Perlego. Las únicas diferencias son el precio y el período de suscripción: con el plan anual ahorrarás en torno a un 30 % en comparación con 12 meses de un plan mensual.
Somos un servicio de suscripción de libros de texto en línea que te permite acceder a toda una biblioteca en línea por menos de lo que cuesta un libro al mes. Con más de un millón de libros sobre más de 1000 categorías, ¡tenemos todo lo que necesitas! Obtén más información aquí.
Busca el símbolo de lectura en voz alta en tu próximo libro para ver si puedes escucharlo. La herramienta de lectura en voz alta lee el texto en voz alta por ti, resaltando el texto a medida que se lee. Puedes pausarla, acelerarla y ralentizarla. Obtén más información aquí.
Sí, puedes acceder a Jardín novelesco de Ramón María Del Valle-Inclán en formato PDF o ePUB, así como a otros libros populares de Literatura y Literatura general. Tenemos más de un millón de libros disponibles en nuestro catálogo para que explores.

Información

Editorial
SAGA Egmont
Año
2021
ISBN
9788726495928
Categoría
Literatura

COMEDIA DE ENSUEÑO

(Una cueva en el monte, sobre la encrucijada de dos caminos de herradura. Algunos hombres á caballo llegan en tropel, y una vieja asoma en la boca de la cueva. Su figura se destaca por obscuro sobre el fondo rojizo donde llamea el fuego del hogar. Es la hora del anochecer, y las águilas que tienen su nido en los peñascales, se ciernen sobre ellos con un vuelo pesado que deja oir el golpe de las alas.)
la vieja
¡ Con cuánto afán os esperaba, hijos míos! Desde ayer tengo encendido un buen fuego para que podáis calentaros. Vendréis desfallecidos.
(La vieja éntrase en la cueva, y los hombres descabalgan. Tienen los rostros cetrinos, y sus pupilas destellan en el blanco de los ojos con extraña ferocidad. Uno de ellos queda al cuidado de los caballos, y los otros, con las alforjas al hombro, penetran en la cueva y se sientan al amor del fuego. Son doce ladrones y el Capitán.)
la vieja
¿Habéis tenido suerte, mis hijos?
el capit Á n
¡ Ahora lo veréis, Madre Silvia! Muchachos, juntad el botín para que puedan hacerse las particiones.
la vieja
Nunca habéis hecho tan larga ausencia.
el capitán
No requería menos el lance, Madre Silvia.
(La Madre Silvia tiende un paño sobre el hogar, y sus ojos acechan avarientos cómo las manos de aquellos doce hombres desaparecen en lo hondo de las alforjas y sacan enredadas las joyas de oro que destellan al temblor de las llamas.)
la vieja
¡ Jamás he visto tan rica pedrería!
el capitán
¿ No queda nada en tus alforjas, Ferragut?
ferragut
¡ Nada, Capitán!
el capitán
¿Y en las tuyas, Galaor?
galaor
¡ Nada, Capitán!
el capitán
¿ Y en las tuyas, Fierabrás?
fierabrás
¡ Nada!...
el capitán
Está bien. Tened por cierto, hijos míos, que pagaréis con la vida cualquier engaño. Alumbrad aquí, Madre Silvia.
(La Madre Silvia descuelga el candil. El Capitán requiere sus alforjas, que al entrar dejó sobre un escaño que hay delante del fuego, y los ladrones se acercan. Sobre aquel grupo de cabezas cetrinas y curiosas flamea el reflejo sangriento de la hoguera. El Capitán saca de las alforjas un lenzuelo bordado de oro, y al desplegarlo se ve que sirve de mortaja á una mano cercenada: una mano de mujer con los dedos llenos de anillos y blancura de flor.)
la vieja
¡ Qué anillos! Cada uno vale una fortuna. No los hay ni más ricos ni más bellos. Aprended, hijos...
el capitán
¡ Bella también es la mano, y mucho debía serlo su dueña!
la vieja
¿ No la has visto?
el capitán
No... La mano asomaba fuera de una reja, y la hice rodar con un golpe de mi yatagán. Era una reja celada de jazmines, y sin el fulgor de los anillos la mano hubiera parecido otra flor. Yo pasaba al galope de mi caballo, y sin refrenarlo la hice caer entre las flores, salpicándolas de sangre: apenas tuve tiempo para cogerla y huir... ¡ Ay, si hubiera podido imaginarla tan bella!
(El Capitán queda pensativo: una nube de tristeza empaña su rostro y en los ojos negros y violentos que contemplan el fuego tiembla el áureo reflejo de las llamas y de los sueños. Uno de los ladrones alcanza la mano, que yace sobre el paño de tisú, é intenta despojarla de los anillos que parecen engastados á los dedos yertos. El Capitán levanta la cabeza y fulmina una mirada terrible.)
el capitán
Deja lo que no puedes tocar, hijo de una perra. Deja esa mano que en mal hora cortó mi yatagán. ¡ Así hubieran cegado mis ojos cuando la vi! ¡ Pobre mano blanca que pronto habrá de marchitarse como las flores diera todos mis tesoros por unirla otra vez al brazo de donde la corté!...
la vieja
¡ Y acaso hallaras un tesoro mayor!
el capitán
Y por ver el rostro de aquella mujer diera la vida. Madre Silvia, tú que entiendes los misterios de la quiromancia, dime quién era.
(El Capitán suspira, y los ladrones callan, asombrados de ver cómo dos lágrimas le corren por las fieras mejillas. La Madre Silvia toma entre sus manos de bruja aquella mano blanca, y sin esfuerzo la despoja de los anillos. Luego frota la yerta palma para limpiarla de la sangre y poder leer en sus ra...

Índice

  1. Jardín novelesco
  2. Copyright
  3. Other
  4. ¡ MALPOCADO!
  5. LA ADORACION DE LOS REYES
  6. EL MIEDO
  7. TRAGEDIA DE ENSUEÑO
  8. UN CABECILLA
  9. LA MISA DE SAN ELECTUS
  10. EL REY DE LA MASCARA
  11. UN EJEMPLO
  12. DEL MISTERIO
  13. A MEDIA NOCHE
  14. COMEDIA DE ENSUEÑO
  15. NOCHEBUENA
  16. GEORGICAS
  17. FUE SATANAS
  18. LA HUESTE
  19. EGLOGA
  20. UNA DESCONOCIDA
  21. HIERBAS OLOROSAS
  22. ORACION
  23. SobreJardín novelesco