Diez mil millones
eBook - ePub

Diez mil millones

  1. 208 páginas
  2. Spanish
  3. ePUB (apto para móviles)
  4. Disponible en iOS y Android
eBook - ePub
Detalles del libro
Vista previa del libro
Índice
Citas

Información del libro

Éste es un libro de terror. Al igual que en Frankenstein, nosotros hemos construido al monstruo, nosotros somos sus víctimas y ahora tratamos inútilmente de detenerlo. Los hechos son simples: la población mundial crece, los recursos tienen un límite y las consecuencias de explotar esos recursos están cambiando de forma irreversible las condiciones de vida de nuestro planeta. No se trata de una denuncia más. El autor de este libro es un científico y todo cuanto aparece en estas páginas procede de estudios comprobados que nos transmiten el mismo mensaje: Estamos condenados. Tiramos la mitad de lo que compramos como si los productos fueran inagotables; explotamos los recursos naturales como si salieran de la nada; y seguimos extendiéndonos por la faz del planeta. Hagamos lo que hagamos, cerremos los ojos, nos vayamos a vivir al campo o nos suicidemos, el resultado será el mismo. No podemos impedir nuestra propia desaparición como especie. «Emmott nos lanza predicciones terribles apoyadas por hechos incuestionables» (Andrzej Lukowski, Time Out).

Preguntas frecuentes

Simplemente, dirígete a la sección ajustes de la cuenta y haz clic en «Cancelar suscripción». Así de sencillo. Después de cancelar tu suscripción, esta permanecerá activa el tiempo restante que hayas pagado. Obtén más información aquí.
Por el momento, todos nuestros libros ePub adaptables a dispositivos móviles se pueden descargar a través de la aplicación. La mayor parte de nuestros PDF también se puede descargar y ya estamos trabajando para que el resto también sea descargable. Obtén más información aquí.
Ambos planes te permiten acceder por completo a la biblioteca y a todas las funciones de Perlego. Las únicas diferencias son el precio y el período de suscripción: con el plan anual ahorrarás en torno a un 30 % en comparación con 12 meses de un plan mensual.
Somos un servicio de suscripción de libros de texto en línea que te permite acceder a toda una biblioteca en línea por menos de lo que cuesta un libro al mes. Con más de un millón de libros sobre más de 1000 categorías, ¡tenemos todo lo que necesitas! Obtén más información aquí.
Busca el símbolo de lectura en voz alta en tu próximo libro para ver si puedes escucharlo. La herramienta de lectura en voz alta lee el texto en voz alta por ti, resaltando el texto a medida que se lee. Puedes pausarla, acelerarla y ralentizarla. Obtén más información aquí.
Sí, puedes acceder a Diez mil millones de Stephen Emmott, Antonio-Prometeo Moya Valle en formato PDF o ePUB, así como a otros libros populares de Literatura y Ensayos literarios. Tenemos más de un millón de libros disponibles en nuestro catálogo para que explores.

Información

Año
2013
ISBN
9788433927989
Categoría
Literatura

¿Cómo hemos llegado a esta situación?

Hemos llegado a esta situación en virtud de una serie de «acontecimientos» que han dado forma a las civilizaciones y las sociedades, en particular la revolución agrícola, la revolución científica, la revolución industrial y, en Occidente, la revolución de la salud pública.
Estas revoluciones han moldeado básicamente nuestra vida y nuestro planeta. Su legado seguirá moldeando nuestro futuro. En consecuencia, necesitamos observar nuestro crecimiento y nuestras actividades teniendo en cuenta estos progresos.
En 1800 la población mundial había llegado a mil millones.
Una de las causas principales de este crecimiento fue la invención de la agricultura. La revolución agrícola nos permitió dejar de ser cazadores-recolectores para convertirnos en productores de alimentos altamente organizados.
Este avance fue crucial para romper los ciclos de hambre que persistieron durante milenios y nos permitieron expandirnos rápidamente. En realidad, y hablando en términos generales, hubo cuatro revoluciones agrícolas.
La primera se produjo hace 13.000 años, y consistió en la domesticación de los animales.
La segunda revolución, en el siglo XIII de Nuestra Era, supuso el comienzo de la siembra selectiva de plantas y tipos de plantas.
La tercera revolución agrícola –esa que nos enseñan a todos en la escuela– ocurrió entre los siglos XV y XIX. Representó una revolución en la productividad agraria y, en particular, en la mecanización de la producción de alimentos.
La cuarta se produjo entre los años cincuenta del siglo XX y la actualidad. Es la llamada «Revolución Verde».
Pero aquí hay que tener en cuenta otro factor: el principio de una transformación fundamental: el uso de la tierra por los seres humanos.
Ciento treinta años después éramos ya dos mil millones.
Fue en 1930. Se habían notado los efectos de otra revolución, la industrial. La fabricación en serie, la innovación tecnológica, los nuevos procesos industriales y el transporte estaban transformando el mundo.
La incesante expansión de la agricultura y la revolución de la salud pública nos permitieron seguir creciendo a gran velocidad.
Pero también aquí hay que tener en cuenta otro factor: el comienzo de nuestra letal adicción al carbón, el petróleo y el gas como fuentes principales de energía.
Treinta años más tarde alcanzamos la cifra de tres mil millones.
Fue en 1960, y estábamos en mitad de una revolución alimentaria. Éramos más. Muchos más. Necesitábamos más comida. Mucha más comida. Más de la que podía proporcionar el sistema agrícola existente.
Lo que acabó llamándose «Revolución Verde» aportó esta comida extra, gracias a:
el uso a escala industrial de pesticidas químicos, herbicidas químicos y fertilizantes químicos;
una ampliación sin precedentes de la explotación de la tierra;
y la industrialización general de todo el sistema de producción de alimentos. Lo cual supuso la industrialización de la alimentación y crianza de animales destinados a la alimentación: desde la aparición a escala industrial de flotas de «factorías pesqueras» hasta las granjas de cría intensiva.
Para que esta revolución alcanzara sus objetivos, el medio ambiente tuvo que pagar un alto precio:
pérdida de hábitats,
contaminación,
sobrepesca.
Además originó una reducción de especies sin precedentes. Y dio comienzo a la degradación de ecosistemas completos.
En 1980, veinte años después, éramos cuatro mil millones de personas en el planeta.
La Revolución Verde había producido una cantidad mucho mayor de comida. La abundancia la abarató.
A su vez, esto significó que los occidentales disponíamos de más dinero para gastar. Habíamos empezado a gastarlo en «bienes de consumo»: televisores, aparatos de vídeo, walkmans, secadores de pelo, coches y ropa.
Y no olvidemos las vacaciones.
En el centro de este gasto desenfrenado estaba el asombroso aumento de los medios de transporte.
En 1960 había cien millones de coches en las carreteras del mundo; en 1980 había trescientos millones.
Este aumento trajo consigo una espectacular ampliación de la red viaria: enormes extensiones de terreno acribilladas y destripadas, con la consiguiente y creciente pérdida de hábitats para otras especies.
En 1960 recorrimos 100.000 millones de kilómetros-pasajero; en 1980 recorrimos un billón de kilómetros-pasajero.
Los transportes mundiales aumentaron a la misma velocidad meteórica. Todos los bienes de consumo que comprábamos, toda la comida que consumíamos y todas las materias primas y recursos necesarios para fabricarlo todo circulaban alrededor del mundo entero.
Sólo diez años después, en 1990, éramos ya cinco mil millones.
Por entonces empezaron a manifestarse las primeras consecuencias de nuestro crecimiento. Una, y no la menor, tenía que ver con el agua.
Nuestra necesidad de agua –no sólo la que bebíamos, sino también la que nos hac...

Índice

  1. Portada
  2. ¿Cómo hemos llegado a esta situación?
  3. ¿Qué tipos de retos tendremos que afrontar en los próximos años a causa del crecimiento de la poblac
  4. Así pues, ¿qué opciones tenemos?
  5. ¿En qué situación nos deja esto?
  6. Créditos